Subaru WRX STI Final Edition: un adiós a la altura

El Subaru WRX STI es, seguramente, el modelo más representativo de la marca japonesa. De hecho, en 2019 cumple 25 años de vida. Ahora es la cuarta generación la que se despide, y lo hace por todo lo alto con una edición especial limitada a ocho unidades en nuestro país que será objetivo de coleccionistas. Se llama Subaru WRX STI Final Edition, y de él tenemos seis unidades con la carrocería azul WR Blue Pearl y otras dos que vendrán en negro Crystal Black Silica.

En ambos casos, el Subaru WRX STI Final Edition ofrece los mismos detalles distintivos respecto al modelo convencional. De serie, incorpora unas llantas doradas de 19 pulgadas a través de las cuales asoman unas pinzas de freno Brembo plateadas que actúan sobre unos discos perforados y ventilados de 340 milímetros delante y de 326 mm detrás. Los neumáticos que se incluyen son unos Yokohama Advan Sport de 245/35/19, mientras que a nivel estético aparecen detalles como un ribete rojo que luce sobre la parrilla delantera, el spoiler delantero específico y las salidas de escape cromadas.

También tenemos detalles específicos en el habitáculo del Subaru WRX STI Final Edition, como son una palanca de cambios con la parte superior en rojo, un botón de arranque en el mismo color, un volante de cuero o la placa que identifica el número de unidad ante la que nos encontramos. También destacan los asientos deportivos tipo bacquet, los pedales de aluminio, la pantalla de siete pulgadas de la consola central, el sistema de navegación, la cámara de visión trasera o el equipo de sonido Harman Kardon con nueve altavoces.

Donde no presenta cambio alguno el Subaru WRX STI Final Edition es en el motor, de tal forma que disfrutaremos una vez más del propulsor bóxer de 2.5 litros y cuatro cilindros que ya conocemos, capaz de desarrollar una potencia de 300 caballos y que se asocia a un cambio de marchas manual de seis velocidades. Conducción en estado puro que, para disfrutar, habrá que abonar 57.500 euros.