Verstappen, votado Piloto del Día del Gran Premio de Estados Unidos

El día se antojaba complicado para los intereses de la joven perla de Red Bull. Hubo varios pilotos con sanción que verían retrasadas sus posiciones de salida. Max Verstappen fue uno de ellos, ya que sustituyó la caja de cambios después de que una rotura de suspensión le impidiese clasificar más allá de la Q2 el sábado. Estaba obligado a realizar otra remontada hasta las posiciones nobles de parrilla.

Una buena salida propició que el piloto de Red Bull comenzase a adelantar rivales desde los primeros giros. Al término de la primera vuelta el de Hasselt ya era noveno. El accidente de Daniel Ricciardo condicionó la carrera, provocando un Safety Car virtual. Max Verstappen hizo su primera parada dos vueltas más tarde que el líder Kimi Räikkönen y puso neumáticos superblandos, con los que consiguió hacer un 'undercut' a Valtteri Bottas. El muro había hecho su trabajo. Ahora le tocaba a Max rubricarlo en la pista.

Con diez vueltas para la conclusión del Gran Premio, Kimi Räikkönen lideraba la carrera con más de un segundo de diferencia sobre Verstappen. No obstante, el holandés todavía tendría que pelear con el hueso más duro de la parrilla en la actualidad: Lewis Hamilton. Los tres pilotos rodaban en una diferencia de apenas tres segundos y el piloto británico de Mercedes tuvo una oportunidad para arrebatar la segunda posición a Verstappen. 

Sin embargo, Max consiguió defenderse; entró algo pasado en la curva 12 y Hamilton pudo colocar su monoplaza rueda con rueda con el Red Bull. La batalla estaba servida entre dos de los perros grandes de la parrilla. El de Mercedes lo volvió a intentar en la 18, con el mismo resultado. Esta vez Verstappen había conseguido sobrevivir a las embestidas de Hamilton, que tendría que conformarse con un tercer puesto que le supo a poco tras salir desde la Pole Position.