Nuevo reto Sainz vs. Hülkenberg: de la pista al laboratorio

Renault firmó con Castrol el año pasado una asociación de cinco años. En ellos confían para luchar a largo plazo por títulos mundiales. El lubricante es uno de los componentes esenciales en el correcto funcionamiento del motor, así que dar con la mezcla perfecta es necesario y con ese objetivo, la marca ha reunido a Carlos Sainz y a Nico Hülkenberg.

El español y el alemán se han puesto las batas de laboratorio para enfrentarse a un nuevo reto: dar con la mezcla perfecta de aceite de competición en el menor tiempo posible. Los pilotos de Renault no sólo han tenido que estar pendientes del cronómetro, pues para Castrol, la marca de lubricantes que usa Renault, la velocidad no es tan importante como la precisión.

El español y el alemán han tenido en torno a media hora para superar una prueba que los profesionales de la firma hacen en sólo unos minutos. El objetivo era conseguir la mejor mezcla posible a pequeña escala.

Tras un apretón de manos, los pilotos se fueron a sus mesas, en las que les esperaban varios recipientes y una báscula para comenzar con la mezcla. Desde el principio, Carlos se lo tomó con calma y le dio importancia a la exactitud en cada material que añadía. "Se trata de tener  precisión, amigo mío", decía.

"Tenéis aquí a un alemán", amenazaba Hülkenberg.

El germano fue finalmente el más rápido en el procedimiento, pero no hubo ganador hasta que se comprobó cuál era la mezcla más precisa. 

"Mi mezcla es mucho mejor", aseguraba Carlos.

Tras pasar las muestras por una máquina, llegaron los resultados, que seguro que sorprenden a más de uno...si no, vean el vídeo: