¿Prepara el McLaren Senna el asalto al récord de Nürburgring?

El circuito de Nürburgring, además de un lugar de peregrinaje obligado para todo aficionado al mundo del motor, es una referencia para todas las marcas de coches. Su complejidad hace de él el escenario de pruebas perfecto, con lo que las marcas logradas allí tienen mucha más repercusión que cualquier otra. El título honorífico de 'coche de producción más rápido' en el Nordschleife es del todo apetecible. Y el McLaren Senna lo quiere. Es lo que se puede deducir después de que hayan pillado al deportivo de Woking con las manos en la masa en la pista alemana.

Desde que Porsche lograse romper la barrera de los siete minutos en el Infierno Verde en 2013 con el 918 Spyder son varios los vehículos que han rebajado este tiempo. El último de ellos y actual poseedor del récord para coches de producción es el Lamborghini Aventador SVJ, que logró detener el cronómetro este mismo año en 6:44.97. Para ello dispone de un motor V12 atmosférico con 770 caballos de potencia y un par máximo de 720 Newton metro. Además cuenta con tracción y dirección a las cuatro ruedas, lo que asegura un extra de agilidad. Sobre el papel es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 2,8 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 350 kilómetros/hora.

Lo cierto es que las cifras que arroja el modelo de Sant'Agata son como para desanimar a cualquiera. Pero no, el McLaren Senna no es de esos. De hecho tiene bastantes opciones de batir la marca de su rival por un detalle que no hemos comentado aún. El Aventador SVJ detiene la báscula en 1.525 kilos, mientras que el deportivo británico lo hace en 1.198. Una ventaja considerable si tenemos en cuenta que el Senna, con motor V8 de 800 caballos, también anuncia una aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en 2,8 segundos. Su velocidad punta, no obstante, es algo menor, 340 kilómetros/hora.

La única duda que presenta este duelo de altura es la influencia que tendrán los diferentes sistemas de tracción de ambos vehículos. Mientras que el Lamborghini apuesta por una tracción total, el Senna es de propulsión. Por suerte Nürburgring tiene tantas curvas que cada vehículo destacará en algún punto, pero será el implacable cronómetro el que diga en su momento cuál es el ganador. Hasta que llegue el siguiente, claro.

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