La mortalidad en accidentes se dispara en Cataluña mientras se estabiliza en el resto de España

Los primeros datos trimestrales de 2018 sobre siniestralidad en nuestras carreteras parecen 'tranquilizadores', aunque no satisfactorios o esperanzadores, si se analizan con un poco más de detenimiento, a causa del repunte en Cataluña.

Entre el 1 de enero y el 3 de abril de 2018, es decir, durante el primer trimestre del año incluyendo Semana Santa, el número de accidentes mortales y de víctimas en carretera se ha mantenido prácticamente estable respecto al año pasado… pero el objetivo era que las cifras descendiesen. No lo han hecho, sino que en realidad ocultan un resultado ligeramente negativo: un 2% más de accidentes mortales y un 1% más de víctimas mortales.

Concretamente han fallecido, durante los tres primeros meses del año, hasta la madrugada del lunes día 3, 264 personas perdieron la vida en carretera, dos más que el pasado año. La mayor parte de accidentes mortales se produjeron en carreteras secundarias y por salidas de carretera. Este dato contrasta especialmente si tenemos en cuenta que el més de enero de 2018 ha sido particularmente nefasto, con casi un 20% más de víctimas mortales que el año pasado, compensado en parte por el descenso en febrero y marzo.

Esta Semana Santa se produjeron 30 víctimas mortales, 3 más que el ejercicio anterior, aunque es el tercer dato más bajo de este lamentable ranking: sólo en 2013 y 2017 se obtuvieron cifras inferiores. No obstante, estos resultados se deben también a una movilidad moderada, ya que en un año el parque automovilístico ha aumentado en casi 900.000 unidades, pero los desplazamientos de largo recorrido han sido 700.000 menos. Es decir, la gente se ha movido mucho menos, lo que 'matiza' un tanto los datos.

Sin embargo, el análisis de los datos también revela algunas realidades alarmantes. La mortalidad del tráfico en Catalunya, por ejemplo, se ha disparado en los primeros meses del año y ha hecho saltar todas las alamas. Hasta el 2 de abril habían fallecido en vías interurbanas catalanas 51 personas a causa de accidentes de tráfico, frente a las 29 del mismo periodo del año pasado. ¡Es un 75% más!, 75,9% para ser exactos. El número de heridos graves, sin embargo, ha sido similar al año anterior, eso sí, justo antes de Semana Santa.

No es Catalunya la única que sufre un repunte. Aragón ha pasado de 7 a 12 fallecidos y Cantabria de ninguna víctima mortal a 7. Valencia ha pasado asimismo de 23 a 29, es decir 6 más. Pero entre estas tres Comunidades no llegan al incremento que se ha dado en Catalunya.

Aunque la velocidad ha dejado de ser la principal causa de accidentes en los últimos informes, y ha 'cedido' el dudoso 'honor' de encabezar el ranking a las distracciones –particularmente el móvil– con la presencia de alcohol y/o drogas en la mayor parte de los accidentes, se sigue incidiendo sobre el tema, quizá porque es más fácilmente controlable o medible.

Las autoridades catalanas del Servei General de Trafic –SGT– ya contemplan varias medidas posibles para actuar de urgencia. Entre ellas, la de alinearse con la media que podría entrar en vigor en Francia próximamente, y reducir la velocidad máxima de 90 a 80 kilómetros/hora en la red de carreteras secundarias, aquellas que no tienen viales separados. Esto cobra sentido, ya que la mayor parte de accidentes en toda España se producen en carreteras secundarias y son por salida de la vía. Una primera medida de carácter provisional pero que no solventa el problema de fondo.

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