Rally Dakar 2018: la prueba más dura del mundo concreta su recorrido

Comprendido entre el 6 y el 20 de enero, la prueba más dura del mundo se inaugurará con una etapa entre Lima y Pisco, a la que sucederán otras cuatro etapas y media en zonas peruanas. La expedición llegará a Bolivia en la sexta jornada, con La Paz asignado como lugar de descanso antes de embarcarse en la séptima etapa. Así, el recorrido seguirá su curso hacia Argentina, donde concluirá la prueba con una etapa bucle en Córdoba, con salida y llegada en el mismo sitio.

En el anuncio se han incluido también los números oficiales de competidores, con una cifra de 525 participantes de 54 nacionalidades diferentes, repartidos entre 337 vehículos, de los cuales 105 serán coches, con 42 camiones y 190 motos-quads. Además, el número de debutantes asciende este año hasta los 78, con Óscar Fuertes y Diego Vallejo encabezando la lista a los mandos de su SsangYong Tivoli DKR, a cuya presentación asistió ayer SoyMotor.com.

Cabe destacar que este año se han reducido notablemente los kilómetros de enlace. Los pilotos tendrán que hacer frente a un recorrido completo de casi 9.000 kilómetros, de los cuales algo más de 4.500 kilómetros serán cronometrados, con siete etapas de dunas en su totalidad y cinco días en los que la altitud superará los 3.000 metros respecto al nivel del mar. Marc Coma, director deportivo del Dakar, ha querido remarcar que la decisión de restar kilómetros de enlace facilitará las labores logísticas de los equipos.

Como de costumbre, será un evento en el que cualquier error puede mandar al traste el trabajo duro y la preparación de todo un año, por lo que una de las claves será la navegación y la habilidad de los pilotos para encontrar los famosos waypoints. Asimismo, el propio Marc Coma ha revelado que el pico de dificultad se alcanzará en la zona argentina de Súper Fiambalá, así que nadie podrá cantar victoria hasta la llegada a Córdoba.

Respecto a la seguridad, la organización de la prueba sudamericana asegura que el trazado ha sido concebido en colaboración con las autoridades locales de cada país. Alrededor de 20.000 policías locales y guardias de seguridad se encargarán de velar por la seguridad y el correcto funcionamiento del evento, además de contar con un dispositivo médico de vanguardia en caso de ser requerido.

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