SsangYong al Dakar: David, un poco más Goliat

SoyMotor.com ha asistido al evento para ser testigo del bautizo público de un coche equipado de serie con una enorme dotación de ilusiones. Prueba de ello fue que el recinto de San Agustín de Guadalix elegido para la ocasión estaba de bote en bote, en contraste con la sencillez del escenario. Mucha gente quiso saber cómo, en apenas dos años, habían logrado catapultar un proyecto desde su inscripción en el Campeonato de España de Rallies Todo Terreno a la participación en la prueba de raids más prestigiosa del mundo.

El germen lo puso SsangYong España, que creyó en la competición como herramienta de marketing en contra de tendencias, y participar en el Campeonato de España de Rallies Todoterreno en 2015, donde Óscar Fuertes se proclamó vencedor con SsangYong en la categoría de dos ruedas motrices. Ahora, tras tres años de bagaje en el CERTT y después de un sólido tercer puesto absoluto en la temporada 2017 –llegaron líderes a la última cita del campeonato–, la marca coreana ha aceptado el desafío de competir en el Dakar 2018.

SsangYong y Fuertes ganaron su derecho a ocupar una plaza en la cuadragésima edición del Dakar al vencer en la Dakar Challenge Europea -disputada durante la la Baja Aragón de este año-, lo que le permite viajar sin pagar derechos de inscripción, y eso fue para la marca y para el piloto como encender una mecha que hoy explota con la presentación en sociedad el Tivoli DKR antes de emprender su viaje en dirección al Dakar.

Somos una marca pequeña, pero hacemos un gran esfuerzo para afrontar este desafío

El máximo responsable de competición –y de prensa– de la marca, Íñigo Trasmonte, ha recordado que el Dakar no es un reto menor: "Somos una marca pequeña, pero hacemos un gran esfuerzo para afrontar este desafío". En este sentido, SsangYong España arrancó su proyecto de competición en el CERTT como una apuesta nacional y, a la luz de la victoria de Fuertes en 2015 y con la presentación del Tivoli Rally Raid durante el Salón del Automóvil de París de 2016, han conseguido recabar el apoyo de la matriz coreana ya para afrontar la actual temporada, pero sobre todo para este nuevo reto, el Dakar, donde participarán como equipo oficial.

Trasmonte mantiene los pies en el suelo y nos recuerda que no cuentan, ni de lejos, con el dispositivo ni la inversión de otros equipos oficiales, como la armada de Peugeot, Mini, o Toyota Overdrive, por lo que fijan su objetivo en terminar la carrera y posicionarse bien entre los debutantes en la categoría T1.1. En todo caso, palabras mayores para un David que se ha vuelto un poco más Goliat.

Las 14 etapas que se disputarán del 6 al 20 de enero y los más de 4.000 kilómetros que recorrerá por territorios de Perú, Bolivia y Argentina, harán una vez más del Dakar la carrera más dura y emblemática del panorama mundial.
 

EL EQUIPO

Para afrontar este reto, SsangYong ha formado una pareja de excepción con su piloto de confianza Óscar Fuertes y Diego Vallejo como copiloto. Fuertes es cuatro veces campeón de España de rallies en distintas categorías –dos campeonatos de rallies de tierra, un campeonato de todoterreno y un campeonato de tierra en el grupo N– y debuta este año en el Dakar.

Por su parte, Vallejo es pentacampeón de España de rallies en las categorías de asfalto, todoterreno y GT. Conocido por la magnífica dupla formada con su hermano Sergio, cuenta con 28 años de experiencia y dos Dakar terminados en su carnet de ruta.

Ambos contarán con el apoyo de un equipo formado por un jefe de equipo, un ingeniero, cuatro mecánicos y un responsable de logística que prestarán servicio desde un camión 6x6 y dos vehículos de asistencia.

El Tivoli DKR puede rendir a gran nivel

A falta de 44 días para el banderazo de salida en Perú, Fuertes se ha mostrado optimista: "Estoy muy ilusionado y motivado para afrontar con el equipo SsangYong Motorsport nuestra primera participación en el Dakar. Llevamos preparándonos y soñando con esto varios años y, tras mucho trabajo, hemos conseguido hacerlo realidad. Debemos aprovechar la oportunidad de demostrar que el Tivoli DKR puede rendir a gran nivel, pero también ser prudentes y comenzar la carrera con el objetivo de llegar a la meta en Córdoba, lo cual sería un gran éxito. Tengo la suerte de contar con Diego Vallejo como copiloto y estoy seguro de que su enorme experiencia en la carrera será muy importante para cumplir nuestros objetivos".
 

EL COCHE

SsangYong Motorsport ha desarrollado en España el Tivoli DKR especialmente para la ocasión. Un buggy de 4,88 metros de largo y dos toneladas de peso creado bajo la supervisión del preparador experto en off road Javier Herrador. Su chasis multitubular está fabricado en cromo-molibdeno e integra en su estructura la jaula de seguridad que da forma al habitáculo. Por fuera, recuerda lógicamente al buggy Herrator pero cuenta con rasgos estéticos del SsangYong Tivoli.

En el apartado mecánico SsangYong ha recurrido a un motor de competición V8 de 6.2 litros derivado de un bloque americano y situado en posición central trasera para ofrecer un mejor reparto de pesos. Tanto el bloque como la culata están realizados en aluminio para reducir al máximo el peso del conjunto. En cumplimiento con la normativa de la FIA, el sistema de admisión equipa una brida de 39 milímetros, lo que limita su potencia a 405 caballos a 4.200 revoluciones por minuto. La caja de cambios Fortin FRS5 secuencial de cinco velocidades con embrague por convertidor de par y el diferencial autoblocante Torsen se encarga de transmitir toda su potencia al eje trasero.

El sistema de amortiguación y suspensión permite un recorrido de 44 centímetros, que junto a los 2,9 metros de distancia entre ejes y 1,8 metros de ancho de vías serán fundamentales para ofrecer al buggy una gran estabilidad a alta velocidad. Los frenos, por su parte, son cuatro discos ventilados de 280 y 380 milímetros de diámetro –delante y detrás, respectivamente– accionados por unas pinzas Wilwood de 6 pistones y bomba de freno independiente para cada eje. El freno de mano es hidráulico, y los neumáticos unos Yokohama Geolandar M/T G003 montados sobre unas llantas de aleación Walter Evans de 17 pulgadas. Como es habitual, están equipadas con sistema de autoinflado para sortear las dunas del desierto. Por último, para afrontar las etapas del Dakar de hasta 600 kilómetros, el Tivoli DKR equipa un doble depósito de combustible de 400 litros.

SsangYong es una marca vinculada a los vehículos todoterreno desde sus orígenes. De hecho, ya su primer modelo lanzado al mercado en 1954 fue un licencia del Jeep 4x4 para el ejército americano y, desde 1986, está especializada en vehículos todoterreno.

Tanto es así que hoy, en plena moda SUV, la totalidad de la gama de SsangYong –incluso el enorme familiar Rodius– son vehículos capaces de circular fuera de asfalto con tracción integral.

Quizá esto ayude a entender la apuesta de SsangYong Motorsport por el Dakar y el desarrollo del Tivoli DKR.  Además, independientemente de su actuación dentro de 44 días en Sudamérica, ya es una muestra de cómo un humilde proyecto de competición de una marca pequeña puede convertirse por méritos propios en un hito de dimensión internacional.

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