Verstappen lidera y Renault da una vuelta de tuerca a su motor

El punto de interés del día ha sido el avance de Red Bull, que hoy ha forzado un poco más el nuevo motor Renault para comenzar a extraer rendimiento. Verstappen ha rebajado en prácticamente un segundo el tiempo que Ricciardo hizo ayer para detenerse a tan solo un par de décimas de su tiempo en la sesión de clasificación del pasado sábado.

Max ha comenzado con un 1'24"3 con neumáticos medios. Con los blandos, lo ha rebajado primero dos décimas y luego una más antes de pisar a fondo el acelerador y conseguir el que ha sido el mejor tiempo de toda la jornada, un 1'23"2 con gomas blandas. El holandés ha hecho tres simulaciones de clasificación antes de la pausa de mediodía, aunque sólo en la última ha sido capaz de acercarse a los tiempos oficiales del sábado. En tres ocasiones ha preferido jugar al escondite y levantar el pie tras establecer el primer sector absoluto. 

El día ha comenzado con sorpresa. Mercedes había convocado a Esteban Ocon, pero a última hora ha subido al volante a Pascal Wehrlein. El motivo es que el equipo tenía previsto probar varias mejoras y han preferido confiar en su probador oficial, que no deja de ser un campeón forjado en el DTM. Ocon ya rodó ayer con el equipo Renault.

El programa de trabajo de los campeones del mundo incluía múltiples stints de hasta siete vueltas de duración y un sinfín de sensores. Wehrlein ha hecho cuatro stints armado con un panel de sensores para evaluar la interacción del aire con el alerón y los neumáticos delanteros. Las comprobaciones aerodinámicas han terminado a las 11:30 horas, instante en el que han comenzado una tanda de 12 vueltas de duración. Completaría otra igual antes de la pausa de mediodía.

En Ferrari, Antonio Fuoco ha tomado el relevo de Sebastian Vettel. Era su segunda aparición en unos entrenamientos como piloto de la Scuderia, pues en julio de 2015 estuvo presente en los test de Austria. En aquella ocasión perdió el control del SF15-T por culpa del agua acumulada sobre la pisa y terminó la sesión contra los muros. En ésta ha tenido la oportunidad de resarcirse para terminar con el séptimo mejor crono y más de 100 vueltas en su haber.

En el apartado técnico, Williams ha rescatado el alerón trasero de dos pisos y el alerón delantero anclado para que Felipe Massa experimentara en primera persona la carga aerodinámica que generarán los coches de 2017. Massa los ha usado hasta las 11:00 horas y los ha vuelto a montar a primera hora de la tarde para evaluar su rendimiento por última vez.

Con la bandera cuadriculada de Montmeló, la Fórmula 1 se despide del Circuit de Barcelona-Catalunya tras tres jornadas de Gran Premio y dos más de entrenamientos. Próximo destino: Mónaco.