¿Es un Nissan GT-R tan rápido como una bala?

Todos sabemos que el japonés es un vehículo muy rápido, fundamentalmente gracias a su motor 3.8 V6 de más de 550 caballos de potencia –600 caballos en la versión Nismo– y a su efectiva tracción integral, capaz de repartir en todo momento la potencia entre los distintos ejes. Pero, ¿realmente puede adelantar a una bala?

Pues bien, si tenemos en cuenta que la mayoría de las armas cortas –pistolas y revólveres-  dispara proyectiles con una velocidad de salida cercana a la velocidad del sonido -340 metros/segundo-, no parece fácil que un vehículo deportivo, por muy potente que sea su motor y alta su capacidad de tracción, pueda circular más rápido que una bala.

Por otra parte, al introducir en la comparativa factores como el peso del proyectil y la deceleración experimentada por el rozamiento de éste con el aire, y si además añadimos que la distancia máxima efectiva de un arma de fuego de largo alcance –rifles de francotirador- es de no más de 2.500 metros, resulta evidente que, en algún momento, la bala tocará suelo y se detendrá, mientras que el deportivo podría seguir circulando con una velocidad casi constante durante mucho más tiempo.

No obstante, en alusión a lo que se observa en el vídeo, y si despreciamos la deceleración del proyectil, en los 15 segundos que dura el vídeo, el disparo habrá recorrido como mínimo 5.200 metros.

Por lo que al GT-R se refiere, si tenemos en cuenta que su velocidad máxima es de 315 kilómetros/hora, y ante una carrera lanzada como la que nos atañe, el japonés recorrerá sólo 1.312 metros en el mismo tiempo.

En definitiva, es evidente que un vehículo nunca podrá ser tan rápido como un proyectil independientemente del arma que lo dispare, pero sin duda el Nissan GT-R es uno de los deportivos más capaces de hacer honor a la expresión “va como un tiro”.