¿Crisis en la India?

Pero aun así, la cantidad de espectadores que en 2012 presenció 'in situ' la carrera ya experimentó un drástico declive en comparación con la que en 2011 asistió a la cita inaugural del circuito: 65.000 personas el año pasado, por 95.000 del anterior.

El entusiasmo que rodea el evento es menor al de las últimas ediciones

En 2013, las ventas son aún menores si cabe y se estancan en 20.000, pero la organización ha mandado un mensaje de calma a través de su directivo ejecutivo, que ha recordado que esperan un aumento de la demanda en las jornadas previas al evento.

"El entusiasmo que rodea el evento es menor al de las últimas ediciones, pero esperamos tener la participación de 2012. Normalmente el ritmo de ventas se acelera en los diez últimos días. Los últimos números que tengo dicen que ya se han vendido 20.000 entradas", ha dicho Sameer Gaur.

La posibilidad de que Sebastian Vettel se proclame campeón del mundo en suelo indio es uno de los principales reclamos de la cita, cuya presencia en el calendario del próximo curso ya ha sido descartada.

"Es natural que haya más gente que quiera ver la carrera, ya que el año que viene no va a estar. Si Vettel ganase el Campeonato en la India, ya sería la guindilla del pastel", añadió una fuente de la organización tras confirmar que la pelouse norte se halla repleta y que, por tanto, ya se han puesto a la venta los accesos a la sud.

Por primera vez en la corta vida del Gran Premio, los aficionados han podido adquirir desde un primer momento la entrada individual para la carrera del domingo, además del habitual boleto conjunto para los tres días del fin de semana. El precio más módico se establece en 24 euros, mientras que el más caro asciende hasta los 252. La renta per cápita del país fue de 856 euros en 2012.