COCHES

REGRESO TRIUNFAL

Praga R1R: 68 unidades de un prototipo de competición

Praga no había creado un coche de carretera desde 1947, hace 68 años
El Praga R1R deriva del modelo de competición y es casi un monoplaza de carretera
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Fernando Sancho
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23 Jul 2015 - 08:43

Praga es uno de los fabricantes más polifacéticos que uno se puede encontrar. La icónica marca vivió años complicados pero en el actual siglo ha sido capaz de desarrollar productos para la competición, tener una amplia gama de karts, construir el avión Praga Alfa, así como otros grandes proyectos. Sin embargo, la marca tenía clavada una espinita, el no haber construido un vehículo de calle en los últimos 68 años.

Y precisamente serán 68 unidades -en honor a este periodo- las que pondrá a la venta de su nuevo deportivo de calle, el Praga R1R. Basado en el Praga R1, un vehículo de carreras, este modelo es un monoplaza de diseño, casi un prototipo de competición al que se le ha domesticado ligeramente para que sin perder su vida de circuito, tenga ciertas comodidades propias de un deportivo. De hecho, Praga ha querido que su R1R no sea individual y su esencia de monoplaza se puede romper con un asiento adicional para un pasajero.

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El Praga R1R tiene una aerodinámica extrema. Este trabajo es palpable en un simple vistazo ya que cuenta con un frontal dividido en tres segmentos. Además de una trabajado semi-alerón con forma de nariz, adosadas aparecen las dos ópticas incrustadas en unos pasos de rueda elevados, casi como un prototipo de Le Mans. El habitáculo también recuerda a los LMP1 con su apertura de puerta de 'Ala de Gaviota'. Flanqueado por dos grandes pontones, la trasera tiene un gigantesco alerón y un difusor muy trabajado como protagonistas.

El Praga R1R está impulsado por un motor sobrealimentado de 2.0 litros. Este motor ofrece una opción con potencia de 330 y otra de 400 caballos, con un par motor que alcanza los 530 Newton/metro (Nm). El peso total del vehículo es de 670 kilogramos gracias a que está construido en forma de monocasco de fibra de carbono, por lo que su relación peso/potencia es muy notable. Gracias al trabajo aerodinámico mencionado, el R1R genera una gran carga a velocidades superiores a los 200 kilómetros/hora.

Con un interior espartano propio de la competición, formado por uno o dos baquets de competición, las comodidades son mínimas. Eso sí, estar dentro del P1R puede ser una sensación muy parecida a la de estar dentro de un LMP1, ya que cuenta con un volante de competición y la fibra de carbono vista es el material principal. Por cierto, su precio es de 198.000 euros y Praga ofrece una gran oferta de personalizaciones para que tu R1R sea exclusivo, incluso dentro de las únicas 68 unidades que serán producidas.

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