Mikel Azcona brinda el título del WTCR a sus padres

"¡Increíble, increíble!", dijo un Azcona encantado y todavía casi levitando, una vez pudo ‘liberarse’ de los abrazos con los miembros de su equipo y salir ileso del manteo al que fue sometido. Por una vez el tranquilo, casi impertérrito navarro, dejó que el júbilo se desencadenara.

"Es algo que no puedo creer. Trabajé toda mi vida para esto. Los cuatro últimos años aquí en el WTCR han sido muy duros, pero trabajo siempre para ganar el campeonato. Básicamente este es el trabajo de mi vida, incluso de mi familia. Mamá y papá, gracias por todo. Ellos me dieron esta oportunidad de jugar en este deporte. Ahora somos campeones del mundo”, dijo Azcona que une este título a los dos Europeos que logró con anterioridad, siendo piloto de Cupra"

Mikel sabe que ha hecho muy felices a su familia, pero también a sus amigos, a todos los de su pueblo. "Somos una pequeña familia de un pequeño pueblo y ahora somos campeones del mundo. ¡No tengo palabras!. Es una sensación increíble. Gracias a mi equipo BRC Hyundai N Squadra Corse por darme el mejor auto, gracias a Norbert [Micheliz] y Nicky [Catsburg] también por ayudarme, porque los rebufos son muy importantes en esta pista y me lo ofrecieron".

Azcona correrá mañana tranquilo, sin presión, todo lo contrario de lo que le sucedió en la Q2 y Q3. "Fue muy difícil concentrarme, sobre todo en la Q3. Estábamos al límite de lograrlo, gracias a mis compañeros por la doble estela”, pero mañana ve difícil la victoria “porque superar a los Audi en estas largas rectas es muy difícil. De todas formas, ganar el título de esta manera es increíble. Ahora hay que celebrar y disfrutar".