Vasseur admite que Hamilton ha firmado por tres años con Ferrari

"Lewis se ha preguntado dónde tendría más oportunidades de lograr el título en 2025, 2026 y 2027. Y ha respondido, en Ferrari".

La admisión de este dato es importante para ambas partes. Ferrari está en periodo de reestructuración y para ello necesita atraer talento. La presencia de Lewis por tres años, el anuncio, tiene así todos los visos para intentar provocar un ‘efecto llamada’… que quizás se multiplicaría si pudiera convencer a Newey.

"Tenemos buenos ingenieros en Ferrari, pero debemos reforzarnos. Lewis es un símbolo importante porque envía un mensaje de apuesta por el futuro del equipo. La mayor parte de técnicos están en Gran Bretaña. Si te vas de un equipo a otro, de Mercedes a Red Bull, por ejemplo, no tienes que mudarte de casa ni cambiar los niños de colegio, ni el trabajo de tu pareja. Venir a Maranello es otra cosa… no es lo mismo. Espero que el fichaje de Lewis nos ayude a convencerlos", ha admitido abiertamente Vasseur.

No es el único problema, obviamente. La cultura de trabajo británica no es la misma que la italiana. En el pasado Ferrari ha tenido buenos técnicos británicos, pero algunos de ellos no han aguantado mucho tiempo y han vuelto a Gran Bretaña. Afortunadamente, también hay ahora muchos ingenieros de otros países, lo que quizás haga más sencillo el captar a algunos.

En los últimos tiempos, Ferrari ha perdido a hombres que eran importantes en su organigrama. El último, Enrico Cardile, que se pasa a Aston Martin. Pero desde el pasado año también ha perdido a David Sánchez y Laurent Mekies, mientras que Iñaki Rueda fue cambiado a otras posiciones en el seno de Ferrari y Xavi Marcos ha sido relevado como ingeniero de Leclerc por Bryan Bozzi.

Han llegado, por el contrario, Loic Serra, Jerome D’Ambrosio o Cedric Sambardier, pero en Ferrari están a la espera de un gran nombre que pueda hacer las veces de director técnico. El cargo está ahora en manos de Vasseur, pero en el pasado reciente, con Mattia Binotto, ya se vio que dirigir el equipo y asumir la responsabilidad técnica son demasiadas cuerdas para un violín… o demasiados fogones para un ‘Master Chef’, como algunos han bautizado a Vasseur.