¿Mereció Fernando Alonso la penalización? Tengo muchas dudas

Pienso sencillamente que no. Que Russell resultó ‘escupido’ por el piano interior, como le había sucedido a Dennis Hauger en la carrera de F2, a lo que posiblemente ayudó una corrección de volante, quizás incluso tener que tomar un poco el freno o si pilló aire sucio cuando menos lo necesitaba. Al menos esto es lo que deduzco de las imágenes –pocas– a las que he tenido acceso y que he visionado en repetidas ocasiones.

Es cierto, Mercedes protestó. Russell acusó a Fernando, que frenó –muy ligeramente, según la FIA– 100 metros antes… aunque asume que ello le pilló por sorpresa.

Incluso me da que la penalización impuesta tiene que ver con un tema de ‘imagen’ de los comisarios, tras la filtración que acusó a Mohammed Ben Sulayem de haber ‘presionado’ para que a Fernando le retirasen la penalización en el GP de Arabia Saudí del pasado año.

Alonso admite que cometió un error, que quería probar otra cosa, entrar más lento para salir más rápido, pero que erró el cálculo y tuvo que volver a acelerar, aunque es evidente que perdió mucha velocidad.

Aston Martin y Fernando han aceptado la sanción, pero no sería extraño que pidieran una revisión… aunque es poco probable que la consigan.

El acta de los comisarios no es transparente. Más me parece una unión de razones, ensambladas, de forma un poco forzada en algún caso, con las que intentar justificar una durísima decisión. Sobre todo teniendo en cuenta que el acta de los comisarios afirma que "los comisarios consideraron que no tienen información suficiente para determinar si la maniobra de Alonso tenía como objetivo causar problemas a Russell o si, como les dijo a los comisarios, simplemente estaba tratando de conseguir una mejor salida".

Hay un principio de justicia que señala ‘in dubio, pro reo’, es decir, ‘en caso de duda, en favor del acusado’. Porque consideran que la maniobra de Fernando fue ‘errática’, aunque admiten en el fondo que pudo no serlo. En otras palabras, tienen dudas sobre lo ocurrido.

En cualquier caso, las reglas son las reglas y los árbitros, sus intérpretes. Sus decisiones hay que acatarlas, aunque eso no implique que discrepemos.

En esta ocasión tengo muchas dudas sobre esta decisión. Claro que mi visión de las carreras difiere de la visión oficial de hoy, en la que todo o casi todo es sancionable y atenaza a los pilotos, coartando tanto ataques como defensas.