Dakar y el 'Women Power'

Por eso quizás los que vivimos y tenemos presente aquellas épocas y las vemos con interés -y con cierta nostálgica emoción- lo que está sucediendo este año y lo que se anuncia para la próxima edición. Escribo esto mientras se está completando la etapa de este jueves, que puede modificar algo el entorno.

Laia Sanz inició la etapa este martes, la 8ª en el cómputo oficial, metida en los ‘top 15’. Para ella, meterse en los top 20 era casi un sueño, un objetivo ambicioso y difícil, mucho más con un 4x2, significa mucho.

Significa mucho porque es la ‘reivindicación’ de un ‘coche gordo de verdad’, ese que Cristina Gutiérrez y Dania Akeel tendrán el próximo año, cuando ‘Cris Tortu’ esté enrolada en Dacia, entre Loeb y Al-Attiyah, y Dania tenga un Toyota de Overdrive, apoyado por el importador saudí, como Al-Rajhi. Quizás Laia retome conversaciones con Ford, que las hubo pero de momento quedaron aparcadas.

Pero el ejemplo de Laia, metida de lleno en la pelea por el podio de los 4x4, no es lo único. Aliyyah Koloc y su Revo+ se están defendiendo bien en el primer Dakar de esta piloto de las Seychelles. El coche dista mucho de ser de primera línea, pero sigue en liza, metida en los top 30 y habiendo concluido todas las etapas.

Pero entre los todo terreno ligeros tenemos a Cristina Gutiérrez -en challenger- y Sara Price -en SSV- aspirando todavía a la victoria. Cristina, muy cerca de su compañero Micth Guthrie. Sara está pisando los talones a De Soultrait y Ferreira.

Está Dania Akeel que ha hecho algunas etapas muy buenas. La lituana Emilija Gelazninkiene o la sorprendente Christine GZ -Christine Giampaoli- metidas ambas en los ‘top 10’ de SSV. Rebecca Busi ha estado mirándola de cerca en muchas etapas. Tres chicas en los ‘top ten de SSV.

Curioso, Laia le debe mucho a Carlos Sainz. Cristina, a Sébastien Loeb. Carlos tuvo claro que Laia era la persona adecuada para su equipo Acciona Sainz de Extreme E. Loeb la eligió para la categoría y convenció a Lewis Hamilton que tenía que ser ella. Cristina Gianpaoli y Sara Price también han tenido experiencia en esta categoría.

Parece justo abrir una brecha por ellas. No se sí algún día lograrán la gesta de Jutta o llegar hasta donde lo hizo Andrea Mayer. Pero unas se han ganado el derecho a los medios -mecánica y equipo- para intentarlo, son pilotos empoderadas. Y otras están en los primeros peldaños de un difícil y duro camino y se merecen el apoyo para seguir creciendo.

Lo dicho, ‘Woman Power’. O si lo prefieren ‘Dakar Women Power’.