Alpine apuesta por una 'gran revolución' para 2024: "El coche es completamente nuevo"

Los dos podios que ha conseguido la escudería esta temporada no han sido suficientes para satisfacer las necesidades en Enstone. Lo cierto es que las diferencias entre 2022 y 2023 han sido más que notorias, con una caída de dos puestos en Constructores, desde el cuarto hasta el sexto que certificaron la pasada temporada. 

Después de todo el año, se han dado cuenta de que la evolución del monoplaza actual ha llegado a un punto de no retorno. Es decir, no hay demasiado que ganar con el desarrollo del A523, así que esperan que la solución a ese descenso de rendimiento sea un golpe de timón. 

"Para el coche del año que viene hemos tenido que desbloquear realmente algunas propiedades de nuevo, que es la razón por la que el coche es completamente nuevo, de adelante hacia atrás", ha desvelado Harman a Motorsport.com. "Así que creo que lo veréis por toda la parrilla, porque el coche tiene que durar un par de años mientras buscamos el futuro", ha añadido. 

En 2023, llegó un momento en el que se confirmó que serían sextos en Constructores. Tanto Pierre Gasly como Esteban Ocon estaban encasillados, y en Alpine se dieron cuenta de que no había mucho más que hacer hasta final de temporada. Por eso, pudieron empezar muy pronto a trabajar en lo que se viene para el próximo curso, por eso confían en que el nuevo modelo dé buenos resultados. 

"Sabíamos que no estábamos donde queríamos estar este año, sabíamos que nuestros desarrollos se estaban estancando un poco en el coche, debido a las limitaciones que teníamos", ha afirmado. "Cuando sabes que estás llegando a ese punto, es mejor entender dónde estás en el campeonato, y pensar para ti mismo 'vamos a movernos', y nos movimos razonablemente rápido", ha apostillado. 

"Mecánicamente, arrancamos el coche en la semana 45 de 2022. La parte mecánica, en términos de chasis y esas piezas de equipamiento, y de sacar mucha masa del coche, la empezamos muy pronto. Es algo que hacemos con regularidad. Pero probablemente sea antes de lo que lo hemos hecho nunca", ha reflexionado. 

Harmar no ha obviado los problemas del monoplaza de 2023. En comparación con la otra temporada, no han conseguido el rendimiento esperado y eso no es un secreto para nadie. Mucho menos si se compara con el rendimiento del año anterior. 

"No lo hicimos tan bien como con el A522", ha reconocido cuando le han preguntado por el coche de esta pasada temporada. "Creo que tuvimos un gran curso en 2022, ese año  creo que cada vez que tocamos el desarrollo del coche, pusimos carga, y quitamos mucho peso del coche también. Así que había un montón de rendimiento que se tenía", ha analizado sobre sus posibilidades. 

"A medida que nos acercamos a la asíntota y al tipo de cargas que estamos viendo ahora, se está volviendo más y más complicado, y tienes que entrar en más y más detalles. Y eso significa que tenemos que ser un poco más cuidadosos a la hora de invertir nuestro dinero. Y por eso no creo que este año haya tenido tanto éxito como el 522", ha sopesado. 

Uno de los principales problemas del monoplaza que diseñaron era la puesta a punto. Era difícil conseguir que llegase al punto óptimo, lo que era "su punto débil". "Tiene que funcionar en un margen muy estrecho. Y si vas a un circuito en el que el estado de la superficie es especial o el nivel de confort de marcha es alto, podemos encontrarnos en una situación en la que sea más difícil y los pilotos no disfruten del coche", ha reflexionado. 

"Es bastante estrecho", ha desvelado, por eso siguen trabajando en "ampliarlo un poco". "Pensábamos que lo habíamos ampliado lo suficiente al principio de la temporada, pero está claro que no lo hicimos. En eso estamos trabajando", ha sentenciado.