Andretti ha ganado una batalla, ahora debe ganar la guerra

Andretti debe discutir las condiciones comerciales con Liberty. El actual Pacto Concordia contempla hasta 12 equipos, pero los diez  actuales no parecen estar por la labor, en todo caso parecen empeñados en torpedear la candidatura. Es un Pacto que concluye en 2025 y para 2026 se requiere uno nuevo.

Stefano Domenicali, el CEO de Liberty, tampoco se muestra entusiasmado. Sostiene que la F1 no necesita un equipo americano, sino pilotos americanos. Ahora mismo tienen un equipo, Haas. Y un piloto, Logan Sargeant. Pero ni uno ni otro son protagonistas de la categoría. Haas es un equipo que ha estado más en entredicho y muy cerca de dejar la categoría más de una vez. Y Sargeant ve su futuro comprometido ante la falta de resultados y un exceso de accidentes.

Pero, por el contrario, la cúpula de Liberty está interesada con la entrada de un equipo americano de primer nivel, posiblemente con, mínimo, un piloto americano o al menos popular allí, proveniente de IndyCar.

No hay calendario para ello. No hay fechas. Parece imposible que Andretti pueda estar listo para 2025, tal como era el deseo de Michael y Mario. La idea era clara: entrar en 2025 para conocer el terreno que pisan y estar preparados para ser competitivos ya en 2026, cuando entren en vigor las nuevas reglas.

Este es un problema. El otro, el motor. Es evidente que Cadillac no tiene un motor y que incluso difícilmente puede tenerlo para 2026 si tiene que partir de cero. Encontrar un proveedor de motores no será nada sencillo, sobre todo ahora que el acuerdo posible con Renault parece haber saltado por los aires. Lo peor que puede sucederle a Andretti es que las negociaciones con Liberty se eternicen, no vayan lo suficientemente rápidas.  Será complicado invertir en un proyecto sin saber si te dejarán que salga a la luz.

Lo dicho, Andretti ha ganado una batalla, pero aún debe ganar la guerra. Mal que nos pese.