Vowles lo tiene claro: hay que 'derribar' Williams y construir un equipo nuevo desde los cimientos

Tres meses después de tomar posesión de su cargo Vowles ha dicho claramente: “Hay que reconstruir Williams desde sus cimientos”.

Poco más o menos que ‘derribo total y obra nueva’. O vamos a hacer un equipo nuevo desde cero, manteniendo la licencia y, de momento, el nombre. “Es una decisión difícil de tomar cuando estás a media tabla. Pero en nuestra posición resulta fácil tomarla”, ha dicho Vowles.

Era algo que se veía venir. Los Williams, Frank y Claire, no quisieron ceder nunca el equipo. No quisieron tener accionistas con poder de decisión. Intentaron sacar a bolsa una parte del equipo. Toto Wolff llegó a tener el 10%, pero se fue a tomar las riendas de Mercedes. Lawrence Stroll quiso invertir seriamente en él y recibió un ‘no, muchas gracias’, que llevó al canadiense a comprar Force India. Michael Latifi, padre de Nicolas Latifi, lo apoyó, pero no vio salida y cerró el grifo con la llegada de Dorilton Capital.

El fondo americano está convencido de que la F1, con las reglas financieras actuales y el interés en Estados Unidos, puede ser un buen negocio y por fin parecen decididos a invertir.

Pero las carencias, después de años de vacas flacas, son tales que no vale actualizar instalaciones y herramientas. Buena parte de lo que hay no es que se haya quedado atrás, es que está obsoleto.

Por el momento, Williams no tiene un director técnico. Para Vowles esa no era una prioridad. Primero había que saber lo que se podía hacer y sólo después se podrá hablar de las personas necesarias y adecuadas.

En 2017, el equipo fue quinto del Campeonato, igual que el año anterior. Pero desde entonces ha estado como ‘farolillo rojo’ de la categoría, con excepción de 2021, en el que dejó atrás a Haas, que voluntariamente renunció a competir para preparar las nuevas reglas, y Alfa Romeo gracias a dos resultados absolutamente inesperados en Hungría y Spa.

“Sabemos que dirección tomar. Lo importante es que estamos en una posición en la que podemos derribar todo lo que tenemos y construir un equipo nuevo desde los cimientos, desde cero. Tenemos financiación e inversores disponibles, en este momento. Y, sobre todo, la voluntad y el deseo de hacerlo”, dijo Vowles.

Este año es transición, el próximo también. La idea clave es estar listos para cuando cambien las reglas. Tener los instrumentos necesarios que permitan atraer a buenos ingenieros y que pueden exprimir su talento”.