La revista británica que 'denunció' el conflicto de intereses de los Wolff vuelve a la carga

La FIA abrió una investigación por el posible conflicto de intereses que existía en el matrimonio Wolff. El motivo era el supuesto acceso a información privilegiada y confidencial debido a los roles que desempeñan: mientras Toto es jefe de equipo de Mercedes, Susie es la directora general de la F1 Academy. Fue la revista británica Business F1 quien puso el foco sobre ellos, puesto que fue la primera en hablar del supuesto conflicto de intereses. Sin embargo, la investigación fue breve y finalmente se cerró sin pruebas que demostrasen el conflicto, pero el revuelo causado por ésta fue amplio: los implicados no tardaron en manifestarse al respecto con duras palabras, así como todos los equipos de Fórmula 1, que se desmarcaron del asunto. 

Y cuando parecía que todo había quedado en el olvido, Business F1, en su número de enero, vuelve a arremeter contra Toto Wolff. La revista británica ha revelado que puso el foco en Wolff tras un comentario realizado por el periodista Jonathan McEvoy en su columna en el Daily Mail. En ésta, McEvoy criticó duramente la reacción del jefe de equipo de Mercedes tras el incidente de Carlos Sainz en el Gran Premio de Las Vegas con una alcantarilla. Cabe destacar que mientras se sucedieron las críticas a la Fórmula 1 por todo lo que este incidente desencadenó, Wolff fue el único que defendió la organización. Un comentario que, a muchos, les sonó extraño.

"Un cínico podría decir que la intemperancia en la respuesta de Wolff podría estar vinculada al hecho de que su esposa Susie está conectada financieramente con la F1 en su papel en la F1 Academy. Él mismo ha cultivado un deseo, que ya no cuenta con el apoyo de Liberty Media, de ser el sucesor de Stefano Domenicali al frente de la F1", fue lo que escribió McEvoy.

Y este comentario puso en alerta a Business F1 sobre un posible conflicto de intereses, así que el fundador de la revista se puso manos a la obra y profundizó en el tema... y ahora, un mes después y con la investigación cerrada por parte de la FIA, lo ha vuelto a hacer. 

"¿De qué hablan los Wolff en el desayuno y después en la cama?", se pregunta en el texto Tom Rubython, el fundador de la publicación. 

"Toto Wolff tiene una agenda clara en todo esto. Es un director de equipo en declive, que ha perdido su atractivo. Si el equipo Mercedes no rinde bien en 2024, está fuera. Y lo sabe. De hecho, su tiempo ya ha pasado y probablemente se da cuenta de ello. Casi ningún director de equipo ha tenido éxito más allá de los 50 años", ha apostillado. 

Esto se traduce en otro ataque al matrimonio, pero también ha querido volver a hablar de lo que pasó en diciembre. Susie Wolff afirmó que sentía que todo había sido incluso un ataque con tinte misógino. Sus redes sociales se llenaron de mensajes suyos advirtiendo su disgusto y que no se olvidaría de lo que habían hecho con su familia. 

"El espectáculo de hipocresía montado por Toto y su esposa a principios de diciembre fue sencillamente increíble. Wolff no fue tratada de forma diferente por la FIA que Marko, que también fue investigado por el comité de ética de la FIA en 2023", ha anotado en referencia a los comentarios racistas que hizo el asesor de Red Bull sobre Sergio Pérez. 

"Y Wolff, como es sabido, responsabilizó a Marko de lo sucedido. Pero cuando se le trata de la misma manera, pone el grito en el cielo. La idea de que nuestra historia se basa en un 'odio, desprecio y prejuicio' contra las mujeres es patentemente ridícula. Estamos hablando de una simple historia de conflicto de intereses, que surgió tras las quejas informales de los otros directores de equipo a la FIA", ha sentenciado en la publicación. 

Así pues, según la publicación, sí fueron los directores de equipo quienes denunciaron el supuesto conflicto de intereses ante la FIA, pese a que las nueve estructuras lo negaron a través de un comunicado común. Por el momento, ninguna de las partes implicadas se ha manifestado al respecto. 

Cabe destacar que la investigación hacia los Wolff llegó en un momento crítico entre la FIA y la Fórmula 1. La relación entre ambas partes está más tensa que nunca y a lo largo de la temporadas se han vivido diferentes conflictos entre los dos organismos. Así pues, son muchos los que piensan que la investigación fue tan sólo un episodio más en esta 'guerra'.