La asociación entre Aston Martin y Force India será a largo plazo

La firma, propiedad de Mercedes, quería desembarcar de la mano de Red Bull Racing pero los de Milton Keynes fracasaron en su intento por hacerse con el V6 Turbo de las flechas de plata, de ahí que Aston Martin reorientara su estrategia hacia Force India, que sí cuenta con el propulsor alemán.

Se ha especulado con que el acuerdo Aston Martin-Force India implicaría un cambio de nomenclatura para el proyecto Fórmula 1, así como también unos nuevos colores para ajustarse a la imagen corporativa de los ingleses.

Sin embargo, Vijay Mallya reconoce que a día de hoy no existe ningún contrato firmado y que las reuniones se suceden con la voluntad de desencallar la situación. "Las reuniones todavía están en marcha. Las decisiones llevan su tiempo, no se toman en un segundo. (Aston Martin) tampoco podría estar un tiempo limitado, una asociación de este tipo suele ser a largo plazo", ha dicho Mallya en declaraciones al portal estadounidense Motorsport.com.

Las reuniones continuan, las decisiones llevan su tiempo, pero una asociación de este tipo suele ser a largo plazo

Aunque el presupuesto de la nueva escudería no sería descomunal, desde Force India confían en que esta relación les permita atraer nuevos patrocinadores. "Aston Martin es una marca fabulosa. La cuestión no es el dinero que Aston podrá gastar o no, la cuestión es que con el valor de su marca entrarán muchos más patrocinadores".

De cara a 2016, una posibilidad muy real podría ser incluir el nombre 'Aston Martin' a Sahara Force India, al estilo Infiniti Red Bull Racing. "Cuando las directivas y los accionistas estén de acuerdo en las cifras, entonces hablaremos de los detalles. Aún estamos discutiendo las cuestiones económicas, los accionistas de Aston tendrán que aprobarlo", dice además de señalar que "no existe prácticamente ninguna posibilidad" de que Mercedes permita rebautizar su V6 Turbo con el nombre de la marca inglesa.

Los nuevos socios de Force India podrían aprovechar los recursos de la escudería para reforzar su catálogo de productos. "Nuestras instalaciones son buenas. Aston quiere fabricar un supercoche y hemos hablado de aprovechar nuestras habilidades técnicas. Nuestro túnel de viento es un aspecto de la cooperación técnica".