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Es una idea que planea sobre la Fórmula 1 y cada vez se pronuncia con mayor firmeza. Y es que, tras el trágico suceso de Jules Bianchi, el hacer que los cockpits de los monoplazas sea cerrados podría ser una solución para los accidentes a tan mayor escala. Así y apoyándose en accidentes pasados, Lewis Hamilton afirma que estaría a favor de estos cambios para la Fórmula 1 mostrando interés en tener una mejor seguridad, mayor de la que actualmente ya hay. 

Tiene que ser tan difícil. Apenas habrán pasado tres días desde que despidieran a un amigo del asfalto cuando tengan que subirse de nuevo a sus coches. A unos más rápidos y a otros más lentos, pero todos parecidos al que le costó la vida a Jules Bianchi. Encerrarte en un Fórmula 1 con ese pensamiento imborrable está al alcance de unos pocos elegidos. A cualquiera le temblarían las pestañas solo de pensarlo, pero los pilotos están hechos de otra pasta. 

El fallecimiento de Jules Bianchi se ha convertido en un asunto ineludible para todos los pilotos que han comparecido ante los medios de comunicación durante la jornada de hoy. Una de las figuras del paddock más allegadas al francés era Fernando Alonso, quien no dejaba de emitir mensajes en las redes sociales con la frase #ForzaJules hasta que finalmente se conociera su defunción el pasado martes. Con un rostro de profunda tristeza, y dejando a un lado la falta de rendimiento del MP4-30, el ovetense se mostraba profundamente apenado ante el desenlace final del accidente que sufrió en el GP de Japón de 2014.

Valtteri Bottas ha dejado la puerta abierta a una posible salida del equipo Williams cuando termine la temporada 2015. En declaracones a la prensa trasladada al circuito de Hungaroring, el piloto finlandés se ha mostrado optimista sobre las futuras aspiraciones de la entidad de Grove a la lucha por el Campeonato Mundial, si bien ha afirmado no conocer aún el potencial que tendrá el coche del próximo año o incluso la procedencia de los rumores que le sitúan como futuro compañero de Sebastian Vettel en Ferrari, una posibilidad que suena cada vez con más fuerza en el paddock de la Fórmula 1.

Escalofriantes. Sería la única manera de adjetivar los datos nuevos que han llegado acerca de la investigación del accidente de Jules Bianchi. Todo cobra más sentido e incluso más valor el espíritu de lucha mostrado por el francés que peleó hasta el final en el hospital por acabar la carrera. Esta vez no pudo ser así. Y razones no faltan para ello.

Los pilotos de Fórmula 1 llevarán en sus coches el hashtag '#CiaoJules' este fin de semana en Hungría como homenaje a su compañero caído, Jules Bianchi. El piloto francés murió trágicamente tras nueve meses en coma por su accidente en Suzuka en 2014. El pasado martes 21 de julio se celebró su funeral en Niza en el que estuvieron presentes hasta 36 pilotos de carreras, la mayoría amigos de Bianchi y muchos de ellos de la GP2.

Algunos de los pilotos actuales de la parrilla de la Fórmula 1 han viajado a Niza para el funeral de su compañero Jules Bianchi. Según informa Sport Bild: Sebastian Vettel, Felipe Massa, Nico Rosberg y Nico Hülkenberg estarán presentes junto a la familia y amigos del fallecido piloto de 25 años. 

El fallecimiento de Jules Bianchi ha sido un duro mazazo para la familia del automovilismo, quien no ha cesado en rendir homenaje al joven francés desde que se anunciara su muerte la madrugada del viernes al sábado, y las muestras de respeto se han sucedido desde entonces por parte de numerosos sectores.

Jules Bianchi hubiese corrido con Ferrari. La triste noticia del fallecimiento en Niza del que fuese integrante de la Ferrari Drivers Academy ha fomentado la aparición de declaraciones en las que ex trabajadores de Ferrari dan por hecho que Bianchi sustituiría a Kimi Räikkönen.

Nunca muere lo que se recuerda. Es la única forma de resucitar a alguien: nuestra memoria. En nuestros corazones sigue el dolor por el fallecimiento de Jules Bianchi, otro héroe caído en el campo de batalla de alquitrán. El francés ya se encuentra en el Olimpo de la Fórmula 1, con otros como Ayrton Senna o Gilles Villeneuve. Su recuerdo volverá a vivir más que nunca en el GP de Hungría.