Alonso hace balance positivo de las mejoras: "Han traído un poco más de prestaciones"

El bicampeón se ha mostrado muy sincero después de la clasificación del GP de Hungría. Estaba contento después de que Aston Martin lograse que los dos coches se colasen en Q3 y con cierto margen. Es cierto que faltaban a la fiesta Sergio Pérez y George Russell, pero igualmente ha calificado de forma optimista las mejoras. Algo que, de todas maneras, tendrán que confirmar en el Gran Premio, entrando dentro del 'top-10'. 

"Sí, creo que positivo. Es un circuito que sobre el papel no teníamos demasiadas esperanzas, se parecía demasiado a Barcelona donde habíamos sufrido mucho y luego yo creo que las mejoras han traído un poco más de prestaciones", ha subrayado. 

"Hemos entrado en Q3 con los dos coches, ojalá mañana podamos confirmarlo con puntos en los dos coches también", ha especificado. 

Es decir, no se esperaban poder tener tanto ritmo en el trazado de Budapest. Lo cierto es que en Montmeló tuvieron muchas dificultades, y las características de la pista son similares a las de este fin de semana. 

Es consciente de que el domingo las condiciones serán distintas. Este sábado, la lluvia y las nubes bajaron la temperatura de la pista, algo que facilitó también el hecho de poder estar cómodo dentro del coche. Mañana, augura Alonso, habrá un poco más de dificultades en ese aspecto.

"Sí, más calor mañana, habrá que beber bastante. Ojalá tengamos una buena carrera mañana, tenemos las posiciones siete y ocho... hay que amarrarlas como sea", ha confirmado. 

Este Gran Premio, más allá de las dificultades que esperaban, esperaba marcado en el calendario. Las actualizaciones eran importantes y saber si iban o no a funcionar era vital. Así que los entrenamientos libres también se dedicaron a tratar de extraer todo el potencial posible del coche. O, al menos, a intentarlo. 

"Ha sido difícil. El coche se comportó bastante diferente ayer y tuvimos que reajustar muchas cosas. La verdad es que he tenido un fin de semana de una mala suerte importante. Ninguna vuelta con las blandas en los entrenamientos conseguí completarla", ha reconocido. 

Por otra parte, Alonso también ha querido subrayar lo que considera "un error grosero" de la FIA. El asturiano, aunque considera que a veces lo hacen bien, entiende que no fue correcta la forma en la que gestionaron la bandera roja en la Q3, tras el accidente de Yuki Tsunoda. No obstante, piensa que no habría cambiado demasiado las cosas, al entender que el séptimo puesto era casi lo mejor a lo que podían aspirar.

De hecho, si se analiza la última vuelta, Alonso tiene razón: iba ganando algo más de una décima en el primer sector. Sin embargo, en el segundo ya había perdido 155 milésimas y en el tercero, venía pintando los parciales de amarillo.