Análisis GP Catar F1 2021: aprovechar la oportunidad

En la sesión de clasificación éste fue su ritmo:

Sólo cuatro coches fueron más rápidos que Fernando Alonso en la clasificación, lo que suponía el mejor fin de semana del equipo hasta el momento. Con una gran velocidad en la primera zona, marcada por el complejo entre la curva 1 y 2 y entre la 4 y 5 era la zona central en la que se dejaban más tiempo, y en parte también por la parte final, en la que cedían una décima, si bien en todo caso demostraban una gran velocidad, y los problemas en curva lenta de pasadas carreras ya no eran tan evidentes. De hecho, tanto McLaren como Ferrari eran más lentos que ellos en esta zona central, y únicamente la parte final era algo más problemática. Esteban Ocon tampoco estaba muy lejos y sólo había perdido 0,15 segundos en el primer sector y otros 0,15 segundos en el segundo sector con Alonso. Es decir, el Alpine era rápido sin hacer ninguna cosa extraordinaria.

En la carrera ésta fue la situación que tenían:

Y ésta la comparativa con el ritmo de carrera desarrollado:

Sin grandes alardes, seguían en la quinta posición, pero por detrás de Lando Norris y de Sergio Pérez. De hecho, Norris era dos décimas mejor, una de ellas colocada en la primera  parte y la segunda entre el segundo y tercer tramo y Pérez era mucho más rápido, seis décimas de segundo, con un paso por la segunda y tercera parte que era simplemente incontestable. Además, Ocon había perdido también algo de velocidad, pues había caído a la 12ª posición, en ritmo de Sebastian Vettel, Carlos Sainz y Valtteri Bottas, a una décima en cada tramo de Alonso. En el ritmo de carrera ambos pilotos no estuvieron igual de bien que en la clasificación, y cedieron cuatro décimas más que el grupo, a razón de dos en el primer tramo, una en el segundo y otra en el tercero. Los Ferrari, Aston Martin, y prácticamente toda la parrilla, a excepción de Nicholas Latifi, Sainz, Bottas y los AlphaTauri habían perdido menos que ellos. 

Esta posición les hacía ser candidatos a la quinta posición. Pero, sin embargo, acabaron en tercer lugar, con el regreso al podio del asturiano tras siete años largos de sequía. Entonces, ¿a qué se debe este podio? Veámoslo en el gráfico de huecos:

Lo primero y más relevante fueron las 20 primeras vueltas de carrera. Alonso, lejos de retroceder y quedar atrapado, pudo superar a Pierre Gasly, aprovechar su descalabro, y empezar a abrir distancia sobre Lando Norris y Sergio Pérez, que como se había visto tenían más velocidad que el asturiano. Pero en especial la gran clave fue de la vuelta 15 a la 22, cuando la llegada de Bottas hizo que Norris empezara a mirar hacia atrás más que para delante, y Alonso se pudiera concentrar más en terminar de extraer todo el rendimiento al blando, que hasta ese momento había estado gestionando, sin tirar al máximo. Unas vueltas capitales para que Norris perdiera tiempo, y se ampliara todavía más con un Veámoslo, que le terminó por dejar sólo al frente con Pérez. Obviamente, no tenía capacidad para superarle, así que cedió tiempo y la posición. Con el avance de Bottas, y con Alonso controlando a Norris, lo lógico era esta quinta. Pero, sin embargo, Bottas tuvo un reventón y salió de carrera, y en Red Bull optaron por parar a Pérez para meterle en medios, a falta de 17 vueltas para el final de carrera. La lógica decía que, con un control de neumático, Pérez podía tener velocidad para que Alonso ni Norris se acercaran. Pero optaron por pararle, sacándolo tras Lance Stroll y Ocon. Una parada demasiado larga como para recuperar en 16v dio a Alonso la capacidad de llegar al final y convertir una quinta plaza, que supondría haber sido el mejor del resultado, un gran resultado, en una tercera.

En este camino también nos encontramos con un periodo de coche de seguridad virtual, que pudo condicionar el resultado de la carrera. Su importancia y repercusión se puede ver en lo que llevó a perder a Pérez y Norris en las vueltas finales de carrera, y lo que hubiera pasado de no haber salido.

Como se puede ver, de no haber salido Alonso también hubiera acabado por delante, con un hueco de 1,3 segundos en meta. Una parada demasiado larga como para poder recuperarla en esas vueltas fueron clave. Y por esto Alonso fue capaz de regresar al podio. Su coche no estaba para llegar ahí, pero sí para ser el mejor del resto. Y a veces, cuando estás en el lugar adecuado, puedes encontrar una oportunidad no soñada. Fue el caso de Alonso, y su regreso al podio. De la razón que lleva a Alpine a ser tan volátil en el rendimiento da para un largo artículo, que no es objeto del actual. En todo caso, el momento es ahora y el de Alonso llegó en Losail.