Mercedes, la rentabilidad no asegura la continuidad

Lo único que ha trascendido es el techo que Mercedes impone en la renovación de Lewis Hamilton, 18 millones de euros según filtraciones, y Toto Wolff deberá buscar el dinero que le falte en otro lugar.

En estos días hay muchos rumores sobre la continuidad de Mercedes. Incluso Jean Todt, el presidente de la FIA, y Alain Prost admiten la posibilidad que Mercedes se marche. Algo que el escribimos el 28 de diciembre, pero como inocentada. Ya se sabe, una inocentada tiene que tener una cierta base para que parezca creíble, pero entonces no pensábamos que las circunstancias marcadas por la COVID-19 pudieran empujar más en esta dirección... aunque en las negociaciones con Lewis –que, por cierto, ambas partes dicen que todavía no han entrado en el meollo de la cuestión– el dinero no es factor decisivo.

Es cierto que hace justo un mes Ola Källenius, el presidente nuevo de Mercedes, dijo que la F1 era una herramienta de marketing formidable, pero también ha hecho saber a Toto Wolff que le gustaría un equipo de F1 a coste cero.

Algo se cuece. Toto Wolff ha cuantificado recientemente el valor de esa herramienta de marketing, según Motorsport Nextgen Auto. "En 2012, generábamos un retorno publicitario de 60-70 millones de euros. Hoy, hemos alcanzado los 4.500 millones de retorno, en términos de visibilidad y marketing para la marca".

Las cifras me dejan perplejo. La estimación de 2012 me parece exageradamente baja –por más que el equipo estuviera en proceso de formación y McLaren, que usaba el motor Mercedes, estuviera claramente por delante de ellos–, como me parecen exagerados 4.500 millones de retorno en la actualidad.

En cualquier caso, sí que estoy de acuerdo con lo que ha dicho Toto sobre los éxitos, que "han desbloqueado un inmenso potencial. Mercedes se ve en la actualidad como una marca deportiva, cosa que no era así hace diez años. Mercedes es una marca guay y pienso que hemos ayudado mucho a este cambio de imagen".

¿Qué sucederá? Es pronto para decirlo. El anuncio de que Audi deja el DTM el próximo año no es una buena señal. Después de todo, la crisis de 2008 abocó en la marcha de Honda, BMW y Toyota… aunque obviamente no estaban en la posición de fuerza que hoy tiene Mercedes.