Toto Wolff tiene un pasado... en rallies

Ojeda fue tercero de Grupo N con un Peugeot 208 y primero de su clase, N3, tras el ídolo local de la categoría en Alemania, Dieter Gasser, y un tal Jari-Matti Latvala, el actual director del equipo Toyota del WRC; Rafa fue cuarto de grupo N y tercero de N4. Una prueba en la que Xevi Pons (Citroën WRC) fue noveno, justo delante de Harri Rovanperä, el papá de Kalle; Dani Solá (Ford WRC), duodécimo, y Dani Sordo fue decimotercero y ganador del Mundial Junior. Una prueba de dominio Citroën, con Sébastien Loeb por delante de François Duval.

No, ese personaje no era Latvala sino un piloto austríaco en una de sus pocas aventuras fuera de su país, la única en el Mundial. Ese piloto era Torger Christian Wolff, más conocido como Toto Wolff.

Tras algunos éxitos como piloto de Resistencia, acompañando a Dieter Quester a los que unían otros pilotos cuando la ocasión lo requería, como Klaus Wendlinger. Pero Toto se ‘aburría’ con tantas esperas para poder tomar el volante, así que decidió probar en los rallies.

Toto se inició con dos participaciones en 2004, y en 2005 y 2006 realizó dos temporadas completas apoyándose en la estructura de Raimund Baumschlager, uno de los grandes pilotos austriacos de rally de todos los tiempos, propietario actualmente del equipo BRR y que el año pasado hizo debutar un coche eléctrico.

En 2005 logró su única victoria absoluta en el National Triestingtal Rally, y otros dos podios. En 2006 consiguió un solo podio, pero fue primero entre los aspirantes al campeonato austríaco en el Skoda Rally Maribor y acabó el año como subcampeón austriaco.

A partir de ese momento, sus apariciones fueron muy puntuales, las últimas en 2009; sus negocios del automóvil –era accionista de AMG y luego de HWA, e iba a invertir en Williams además de comenzar a manejar a algún piloto– no le dejaban mucho tiempo.

De hecho, el abandono de la competición en 2009 se debió en buena parte a un grave accidente que sufrió en Nürburgring, cuando intenta mejorar el récord que estableció el año anterior sobre un Porsche 911 en 7’03”28. Tras hacerlo dijo: "En el Nordschleife puede suceder cualquier cosa. Como te descuides acabas en el hospital de Adenau".

Frase premonitoria. En 2009 quería bajar de los 6’58” que había marcado Niki Lauda en los años 70… pero en Fuchsröre se salió a casi 270 kilómetros/hora. El Porsche 911 de 460 caballos, idéntico al que había dominado las 24 Horas de Nürburgring, quedó para chatarra. "Nunca habíamos visto un 911 tan dañado", dijeron los técnicos de la marca. En el impacto resultaron dañados algunos nervios y tardó meses en recuperar olfato y gusto y Niki Lauda, gran amigo, le dijo: "ha sido la misión suicida más estúpida que he visto en mi vida".

Ésta es la historia de Toto en los rallies, una historia que comenzó como piloto participando en la Copa Seat Ibiza de circuitos.