No habrá radares fijos en carreteras sin mantenimiento, serán temporales

Los radares de velocidad son una de las principales preocupaciones en carretera para un gran número de los conductores, sin embrago, existe un problema todavía más importante que afecta a todos los conductores, el estado de muchas carreteras y su falta de mantenimiento.

Hasta el momento, radares y carreteras en mal estado son una pareja común, y numerosos cinemómetros se encuentran situados en la proximidad de tramos en un estado de conservación deficiente. No obstante, esto va a ser un fenómeno cada vez menos común, según ha anunciado Pedro Tomás, jefe del Área de Movilidad de la Dirección General de Tráfico, durante la celebración del 24 Encuentro Nacional de Vías y Obras de la Administración Local –Vyodeal–,  un evento celebrado esta semana organizado por la Asociación Española de la Carretera –AEC– en colaboración con la Diputación de Valencia.

No habrá radares en puntos negros estructurales

Las palabras exactas de Pedro Tomás fueron: "Habrá una nueva política de racionalización de controles de velocidad. No habrá radares en puntos negros estructurales si no se han aprobado antes medidas que mejoren la carretera".

Según declaraciones de algunas fuentes oficiales, el objetivo es buscar otras soluciones en los tramos identificados como peligrosos, como pueden ser mejoras en los arcenes, nuevo asfalto, señalización, o modificaciones que aumenten la seguridad de la vía en lugar de recurrir a los radares. Los cinemómetros deben ser sólo una solución temporal y no definitiva para estas carreteras.

Esta reacción llega tras las reclamaciones presentadas por AEC en el congreso, donde se hizo ver la necesidad de aumentar las inversiones en mantenimiento, con un déficit de 6.600 millones de euros que acumulan las carreteras españolas. Además, se aprovechó la situación para anunciar algunas actuaciones que se llevarán a cabo para incrementar la seguridad de los ciclistas.

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