El Kalmar 9x9 es el Porsche 911 que demuestra que para tener casi 1.000 caballos no se necesita un motor eléctrico

Los 'restomod' sobre base del Porsche 911 se suceden, hay un importante mercado y sobre todo hay un parque importante de 911 de ocasión que pueden servir de base para los cada vez más numerosos transformadores, todos ellos con mayores ambiciones.

Ahora nos llega el Kalmar 9X9, presentado en la Semana del Motor de Monterey y al que su creador, el danés Jan Kalmar, define como 'el primer hypercar retro de la historia'. No quiere hablar de 'restomod'.

Silueta Porsche inconfundible, pero más de 900 caballos, elegante y sofisticado. Impacto a primera vista por su elegancia y un a preciosa combinación de colores, verde oscuro con llantas bronce y algún detalle en fibra de carbono. Hay otros colores, eso sí, pero no causan tanto impacto.

Kalmar Automotive, la empresa californiana, fundada por Jan Kalmar, ha partido de la generación 993 del 911 para crear este deportivo inusual, del que su realizador asegura que es capaz de rodar en siete minutos justos en Nürburgring.

Viendo el coche uno descubre, en cierta forma, la historia del 911, o al menos de su gama más actual. Hay detalles que nos hablan del 959 –el ala trasera, por ejemplo– y otros nos llevan al actual 911 Turbo o incluso al GT3. Con estos ingredientes, Kalmar ha conseguido una sutileza de líneas ejemplar.

La carrocería está hecha a base de un centenar de piezas de fibra de carbono impresas en 3D, con barra antivuelco oculta entre ellas para ahorrar así 100 kilos de peso. Y con aerodinámica muy estudiada de forma que a velocidad máxima el 'downforce' supera el peso del coche, 1.450 kilos. El trabajo ha sido espectacular a todos los niveles.

La potencia no es baladí, ¡930 caballos!, extraídos del bóxer de seis cilindros del 911 Turbo S actual… prácticamente 300 caballos más que el de serie, casi un 50% más, lo que requiere un fuerte trabajo. Obviamente se ha trabajado en admisión distribución, pistones, refrigeración, cojinetes cerámicos y programación de la centralita.

Tiene tracción a las cuatro ruedas que, además, son directrices, y un cambio de doble embrague de siete velocidades, original de Porsche. La velocidad está autolimitada a 340 kilómetros/hora y puede acelerar de 0 a 100 en 2 segundos, mientras que el peso es de 1.375 kilos.

Los frenos son carbocerámicos con pinzas de titanio impresas en 3D, las suspensiones se han revisado completamente con nueva geometría delantera de los italianos Dainese Engineering, orientadas, en este caso, más hacia el confort que a la conducción racing con amortiguadores adaptativos Tractive con longitud variable y tercera unidad de amortiguación dependiente de la velocidad para mayor precisión. Conserva ayudas a la conducción como el control de estabilidad. ABS y control de tracción se mantienen, debidamente adaptados. Llantas de magnesio y neumáticos Michelin completan el trabajo.

No es la única versión. Kalmar ofrece tres niveles, 9X9, 9X9 Sport y 9X9 Ligthweiht. Si la versión 9X9 ofrece 930 caballos, ¿qué potencia esperarías del las otrs dos? Obviamente por encima de los 1000 caballos, incluso. Pues no. La otras versiones quieren primar más las sensaciones de conducción… aunque ello les ha llevado a limitar la potencia.

Frente a estos 930 caballos, la versión 9x9 Sport desciende a unos 'modestos' 650 caballos. En este caso, el motor es el 3.0 litros turbo del 911 GTS. Cuenat con transmisión manual y tracción a las cuatro ruedas, aligerado sobre el 9X9 porque prescinde de parte de la insonorización, lo que permite bajar el peso en 75 kilos. La aceleración no es tan aplastante, porque necesita 3,7 segundos para pasar de 0 a 100, pero la punta es la misma, autolimitada a 340 kilómetros/hora. Eso sí, puedes pedirlo con el cambio PDK o el sistema de cuatro ruedas directrices.

La versión más aligerada pesa 25 kilos menos aún, pero el motor es un 4.0 atmosférico de 530 caballos. La ganancia con respeto al 4.0 litros de fábrica es modesta, 28 caballos disponible sólo en tracción trasera y cambio manual de siete velocidades. Pero acelera más que el Sport, 3,2 segundos para pasar de 0 a 100, posiblemente porque lleva un cambio más cerrado y corto; y es que la velocidad máxima es de 310 kilómetros/hora.

Obviamente, los interiores también han sido mejorados. Pero se prescinde de lo superfluo. No hay radio, ni pantallas de información y entretenimiento. Sólo dos pequeñas pantallas, una de ellas para el sistema Bluetooth del celular. Y Kalmar ofrece acabados personalizados, por supuesto.