Jeep Wrangler 4xe 2022: el híbrido enchufable se queda solo

El Jeep Wrangler 4xe 2022 es la versión híbrida enchufable del todoterreno. Desde finales de 2021 es la única que se vende en Europa, puesto que Jeep ha desestimado la comercialización de las unidades Diesel y gasolina con el fin de rebajar sus emisiones medias de CO2.

Este híbrido enchufable se presentó como prototipo a principios de 2020 en el Consumer Electronics Show de Las Vegas, si bien el debut de su variante de producción se demoró por la pandemia de Covid-19.

JEEP WRANGLER 4XE: EXTERIOR

El Jeep Wrangler 4xe toma como base la quinta generación del modelo de combustión.

Uno de los elementos diferenciadores es el punto de carga, que se encuentra en la parte delantera izquierda, justo delante del retrovisor.

El coche incluye múltiples detalles en color azul para trazar un vínculo con la electromovilidad que representa. Entre ellos están el gancho de remolque y el emblema Rubicon. La versión Sahara, más orientada al uso urbano, carece de esstos detalles azules.

Las llantas pueden ser de 17 o 18 pulgadas. Las primeras son para el acabado Rubicon, que cuenta de serie con neumáticos de tacos, mientras que las segundas son para el Sahara y la versión 80th Anniversary, basada en esta última.

Desde 2022 la carrocería del Wrangler 4xe se puede pintar en los siguientes colores: Silver Zynith Metallic Clear Coat y High Velocity Metallic Clear Coat, que son nuevos, y los ya existentes Black, Bright White, Firecracker Red, Granite Crystal Metallic, Sting-Grey, Hydro Blue, Snazzberry y Sarge Green. También hay dos colores especiales llamados Tuscadero y Gobi.

El techo puede ser de lona o rígido. Este último puede ser de tres piezas negro o del color de la carrocería.

JEEP WRANGLER 4XE: INTERIOR

El Jeep Wrangler 4xe 2022 luce un interior continuista con la quinta generación del modelo de combustión. Como sucede en el exterior, existen algunos detalles en color azul, como los pespuntes de los asientos o algunas molduras, que lo identifican como híbrido enchufable.

El cuadro de mandos es parcialmente digital con una pantalla de 7 pulgadas que muestra informaciones específicas de un vehículo híbrido enchufable. En los relojes analógicos que están situados a los lados de esta pantalla hay un cambio respecto a la versión de combustión. El derecho marca ahora el porcentaje de potencia utilizada y también cuando el sistema regenera energía en marcha. Desaparece por tanto de aquí el velocímetro, que pasa a ser enteramente digital.

El sistema multimedia tiene una pantalla de 8,4 pulgadas y es compatible tanto con Apple CarPlay como con Android Auto.

El maletero tiene una capacidad de 533 litros.

JEEP WRANGLER 4XE: EQUIPAMIENTO

El nuevo Wrangler 4xe ofrece en cuanto a sistemas de seguridad y ayuda a la conducción elementos como el detector de ángulo muerto y control de cruce en la parte trasera, la cámara de visión trasera, el control electrónico de estabilidad con mitigación electrónica del balanceo, sensores de aparcamiento delantero y trasero, y Keyless Enter'n'Go. Entre las características de seguridad opcionales cabe mencionar el control de crucero adaptativo, el aviso de colisión frontal plus y una nueva cámara delantera que es de serie en el acabado Rubicon.

Se puede incorporar un sistema de sonido Alpine de nueve altavoces con subwoofer de 552 vatios.

El Jeep Wrangler híbrido enchufable se vende en España con tres niveles de equipamiento diferentes, que son el Sahara, el Rubicon y el 80th Anniversary.

El acabado Sahara dispone de serie del siguiente equipamiento: llantas de 18 pulgadas, faros full led, climatizador automático, cuadro de mandos con pantalla TFT de 7 pulgadas, pantalla multimedia de 8,4 pulgadas, sistema de control de ángulo muerto, Keyless, equipo de audio Alpine con seis altavoces y subwoofer, techo duro de tres pìezas con el color de la carrocería, pasos de rueda en el color de la carrocería, cámara trasera Parkview y estribas laterales.

El Wrangler 4xe Rubicon se ofrece con llantas de 17 pulgadas, techo de tres piezas en el color de la carrocería, pasos de rueda en color negro, protecciones laterales inferiores Rock Rails, adhesivo Rubicon en el capó, adhesivo antideslumbramiento 4xe en el capó, capota de lona Premium Sunrider, barra estabilizadora delantera desconectable eléctricamente, diferenciales delantero y trasero con bloqueo electrónico Tru-Lok y cámara delantera off-road.

La versión 80th Anniversary cuenta con los mismos elementos que el acabado Sahara más asientos de cuero exclusivos, pintura exterior específica blanco brillante o gris granito y revestimiento interior del habitáculo.

Desde 2022 viene de serie en el acabado Rubicon y es opcional en el Sahara el parabrisas Gorilla Glass, tres veces más resistente a los daños.

El fabricante asegura que existen más de 100 accesorios para el Wrangler 4xe firmados por Mopar.

JEEP WRANGLER 4XE: MECÁNICA

El Jeep Wrangler 4xe 2022 combina un motor de gasolina de cuatro cilindros en línea y 2.0 litros con dos motores eléctricos para entregar una potencia total de 380 caballos, con un par máximo de 637 Newton metro. El 2.0 aporta 272 caballos, mientras que el motor eléctrico capaz de mover el vehículo tiene 145.

La transmisión es automática y tiene ocho velocidades. Está fabricada por el especialista ZF.

Monta un motor eléctrico sobre la parte delantera del motor en vez del tradicional alternador. Conectado a la correa del cigüeñal mediante una correa, gestiona el sistema Start&Stop y genera electricidad para las baterías. El segundo motor eléctrico se halla sobre la parte delantera de la caja de la transmisión y sustituye al convertidor de par.

La batería del Wrangler 4xe 2021 tiene una capacidad de 17,4 kilovatios hora. Le confiere una autonomía eléctrica de 45 kilómetros. Esto le otorga el derecho a lucir la Etiqueta Cero de la DGT.

El gasto medio de carburante oficial es de 3,5 litros a los 100 kilómetros, mientras que las emisiones medias son de 44 gramos de CO2 por kilómetro.

El conductor tiene a su disposición tres modos. Por defecto se activa el Híbrido, que usa los dos motores con prioridad para la parte eléctrica. El modo Eléctrico es el que no emite nada de CO2, aunque se desactiva cuando se agota la energía o se requiere más par motor. El modo eSave prioriza el motor de gasolina, guardando la electricidad para más tarde. Existe también un modo llamado Max Regen que viene a ser la retención automática cuando se levanta el pie del acelerador para recuperar la mayor energía posible.

Los motores eléctricos y la batería están sellados a prueba de agua, lo que permite que el Wrangler 4xe vadee corrientes de agua con una profundidad de hasta 76 centímetros.

El coche es en todo caso de tracción total, aunque en función de si se trata de la versión Sahara o de la Rubicon viene con un sistema u otro. Siempre es un sistema de tracción 4x4 conectable con un diferencial central. Se puede elegir circular en propulsión, en tracción total permanente y en tracción total con el diferencial bloqueado. Esta última opción permite conectar la reductora. La versión Sahara tiene una relación de reducción de 2,72 a 1, mientras que en la Rubicon es de 4,1 a 1. En la práctica quiere decir que la versión Rubicon es apta para un uso todoterreno más extremo, puesto que permite avanzar más despacio por las zonas más complejas.

JEEP WRANGLER 4XE: IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN

Hemos podido conducir durante la presentación del Jeep Wrangler 4xe la versión Sahara, es decir, la que está más orientada hacia el uso urbano de las dos disponibles, tres si se cuenta como tal la denominada 80th Anniversary. No obstante, las concesiones urbanas del vehículo son bastante pocas. Una llanta más grande y unos neumáticos de calle que hacen más llevadero el avanzar por carreteras convencionales. Pero que nadie se equivoque, tal y como sucede con la versión de gasolina, el Wrangler 4xe es un todoterreno genuino independientemente de su acabado. Eso quiere decir también que el dueño de este vehículo tendrá que lidiar con los clásicos inconvenientes del Wrangler sobre asfalto. Véanse, por ejemplo, un paso por curva delicado si se va más deprisa de lo que toca y un viento que se nota en exceso desde el habitáculo. Y ojo, que nada de esto se entienda como una crítica. El Wrangler es como es y si esperas que cosas como estas no sucedan simplemente no es tu coche.

Para sacar lo mejor de este icónico Jeep hay que salir del asfalto. Nosotros lo hemos hecho brevemente en Ibiza durante la puesta de largo del modelo y tenemos que confirmar lo que parece una obviedad a estas alturas. No hay terreno que se le resista. Y da igual que se trate de la versión Sahara. Es cierto que nuestro recorrido off-road era de dificultad baja-media, pero aún así no deja de ser sorprendente como frena, cómo gira y, sobre todo, cómo tracciona cuando el pavimento no ofrece el agarre debido. Para retos de mayor altura está la variante Rubicon.

Pero todo eso ya se sabe. Lo interesante de esta versión es, lógicamente, su motor. Sus 380 caballos son muchos. De hecho, se trata del Wrangler más potente jamás vendido en Europa. Ojo con el pie derecho, porque el coche se embala muy deprisa si uno no tiene tiento. Es más, si uno hace uso de la conexión a la red a diario antes de salir de casa, algo fundamental en todo híbrido enchufable, es mejor llevarlo en modo eléctrico especialmente en carreteras de asfalto. Gana mucho en suavidad y esos 145 caballos alimentados por la batería son más que suficientes como para afrontar cualquier reto del día a día. De hecho, se puede circular así hasta una velocidad de 130 kilómetros/hora. La potencia combinada hay que reservarla para ocasiones especiales.

El único punto que no nos ha convencido del sistema híbrido es la entrada en funcionamiento del motor térmico. La transición que le hace emparejar su fuerza con la parte eléctrica debería ser algo más suave, aunque es cierto que el tirón que se nota en este momento no provoca inestabilidad incluso aunque se circule en apoyo. También hay que acostumbrarse al tacto del freno, que es el típico de los vehículos electrificados al que cuesta hacerse en lo que a la precisión de las deceleraciones se refiere.

¿Y qué hay de la autonomía eléctrica? Los 45 kilómetros homologados son bastante realistas. Eso sí, para aprovecharlos bien es fundamental realizar una conducción suave y anticipativa. Tanto o más que en otro vehículo electrificado dadas las dimensiones y el peso del conjunto. La unidad probada pesaba 2.276 kilos, 263 más que la de gasolina con el mismo equipamiento. Por su parte, el gasto de gasolina es muy variable en función del uso que se haga de la parte eléctrica. Si se recarga a diario puede ser incluso nulo dependiendo de los kilómetros que se hagan al día. Si no es así, el consumo será incluso mayor que el de la versión de combustión, y eso son más de 12 litros a los 100 kilómetros con facilidad.

¿Merece la pena realmente este Jeep Wrangler 4xe? Sí, rotúndamente sí. En primer lugar porque es un Wrangler de verdad, que es lo que busca el cliente tipo de este modelo. Segundo porque permite ahorrar bastante combustible con un buen uso y la Etiqueta Cero aporta una serie de ventajas que, a día de hoy, son importantes especialmente en la ciudad. Y tercero, porque todo esto se sostiene con un sobreprecio de tan sólo 3.300 euros respecto al Wrangler de gasolina con el mismo equipamiento, una cifra menor de lo habitual y que no supone tanto cuando se habla de un producto que, en el mejor de los casos, roza los 70.000 euros.

JEEP WRANGLER 4XE: PRECIOS

El Jeep Wrangler 4xe está disponible en España a partir de 68.900 euros con el acabado Sahara. El Rubicon parte de 70.800 euros, mientras que la versión 80th Anniversary empieza desde 72.300.

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