Un Honda Civic Type R se 'estrena' a la salida del concesionario

Tras recibir sus flamantes llaves de color rojo, este chico tomó la calle que le dirigía a la autopista en dirección Nueva York, ciudad que hay que circunvalar para volver a Philadelphia, pero desafortunadamente para él y especialmente para su coche, este trayecto, que debería haber durado 5 horas, terminó demasiado pronto y entre sollozos.

Mientras Ellingson esperaba paciente a que el primer semáforo con el que se encontraba en su viaje se iluminase en color verde, el conductor que venía detrás de él no prestó la suficiente atención a lo que estaba ocurriendo por delante suyo y no pudo frenar a tiempo. Menuda desgracia…

Como resultado del accidente, el recién estrenado Civic quedó ‘aplastado’ entre el vehículo que le impactó por detrás y el coche que tenía justo enfrente, lo cual dejó unas secuelas muy trágicas en la carrocería del compacto radical y, evidentemente, en su incipiente dueño, quien al menos se encuentra sano y salvo.

Como se observa en las imágenes que os presentamos, este Honda tendrá que recibir sutura y recambios en varios de sus paneles, especialmente traseros y frontales, además de sustituir la luna trasera y todo el portón del maletero. Sólo los laterales y el techo del coche quedaron intactos.

Duele ver cómo un coche de más de 320 caballos, tan sensual y cuyo precio no habría bajado de los 40.000 dólares –unos 34.000 euros al cambio– termina en esas condiciones cuando todavía presumía del plástico protector en sus asientos de Recaro y el pulido de fábrica. ¡No hay derecho!

A pesar de los difícil momentos por los que pasaba, Greg tuvo agallas de reírse de la situación y hacerle unas cuantas fotos al estado de su coche, del cual afirma que se hará cargo su compañía de seguros y la propia firma nipona, quien ya le ha dejado un vehículo de sustitución. Afortunadamente, este deportivo de tracción delantera no ha sufrido ningún tipo de daño mecánico, luego todo dependerá de los chapistas.