Audi A4 2023: continúa su programa de pruebas

La próxima generación del Audi A4, el B10, lleva más de un año en fase de pruebas y durante todo este tiempo, las mulas de pruebas han perdido camuflaje poco a poco, como suele ser costumbre. A medida que avanza el desarrollo, los coches de pruebas se acercan más a la versión de producción y el camuflaje, cada vez más escueto, deja cosas interesantes al descubierto.

Por el momento, todas las unidades que se han podido ver en carretera, mantienen el suficiente camuflaje como para ocultar los detalles más importantes, pero hay cosas que no se pueden tapar, como los faros, la calandra o diferentes detalles de su fisionomía.

Lo primero que debemos aclarar es que la próxima generación del A4 no se denominará así, los números pares pasarán a dar nombre, exclusivamente, a los coches eléctricos de la marca, y, por tanto, entrará a formar parte de la gama del Audi A5. Es decir, el B10 será Audi A5 y Audi A5 Avant, al menos así lo afirman desde la revista británica AutoExpress.

No obstante, este cambio de denominación comercial no afectará al coche en sí, que se mantendrá en el segmento intermedio y presentará un diseño evolutivo, como es costumbre en la firma de los cuatro aros.

Eso significa que no habrá revolución en el diseño, que seguirá la misma senda que hasta ahora y que se puede apreciar claramente en las imágenes que se han podido captar, a pesar del camuflaje. La calandra mantiene sus grandes proporciones, aunque para la ocasión, aumenta ligeramente sus dimensiones a lo ancho y las reduce a lo alto. Los faros también cambian. No será un cambio radical, pero sí mostrarán unos rasgos algo más agresivos que hasta ahora.

Se mantienen igualmente las formas curvas en el frontal y muestra un perfil sin complicaciones, con superficies limpias, sin los pliegues de los Audi recientes. Atrás parece seguir la misma línea de diseño característica de las rancheras de la firma alemana, pero en esta parte el camuflaje es más profuso y oculta la forma de los pilotos. De todas formas, es de esperar que adopte las tendencias actuales, con una unión entre los pilotos, que serán muy delgados, que enfatice la anchura general del coche.

Donde sí habrá cambios importantes será en lo referente al apartado técnico. El próximo Audi A4 –que no será A4, sino A5, recordad– mantendrá la plataforma MLB actual, pero se adaptará para el empleo de nuevos motores de combustión, que según el jefe de desarrollo técnico de Audi, Oliver Hoffman, serán los mejores que ha lazado la marca hasta el momento. Opciones propulsoras basadas en el omnipresente 2.0 de cuatro cilindros turbo de la familia EA888. Esta familia de motores estrenará un nuevo turbo con geometría variable y un sistema de inyección que trabaja a mayor presión.

Contará con versiones híbridas enchufables, por supuesto, que también tendrán como base el 2.0 turbo EA888. Estará asistido por un sistema eléctrico de 48 voltios en la parte baja de la gama, mientras que los más potentes se convertirán en híbridos enchufables, que probablemente, emplearán la batería de 14,4 kilovatios/hora, que se monta en el Audi Q5 y en otros modelos basados en la plataforma MLB.

Los motores Diesel, la que fue la tecnología más representativa de la marca, también seguirá presente, pero de una forma secundaria. Por ahora, no se espera que haya más opciones que el actual 2.0 TDI con 201 caballos de potencia y está en duda que el Audi S4 mantenga el propulsor Diesel.

En duda también está una posible versión eléctrica, ya que su plataforma no está pensada para versiones totalmente electrificadas. De todas formas, ninguno de los rivales directos del sedán de los cuatro aros –léase BMW Serie 3 y Mercedes Clase C– ofrecen una variante exclusivamente animada por motores eléctricos.

La presentación del Audi B10 está prevista para los próximos meses y el inicio de las ventas, no antes de 2024.

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