El Rally de Finlandia desde dentro: una experiencia adictiva

La idea de la iniciativa de Toyota España, a quien agradezco sinceramente la invitación, era compartir una prueba de las múltiples competiciones donde está involucrada la marca japonesa, mostrando a los periodistas el funcionamiento interno del equipo –también se hizo este año con Le Mans–, llevándonos a ver la prueba en los mejores lugares posibles.

Lo cierto es que, nada más aterrizar en Jyväskylä, sede del Rally de Finlandia, el equipo nos recibió en el hospitality y comenzó un estupendo tour por las entrañas del equipo del WRC.

Foto: Nuno O'Niel

 

En este sentido, un ingeniero nos explicó cómo funcionaba el Service Park, es decir, el parque de asistencias donde todos los equipos del WRC tienen su base.

En el caso de Toyota, como podéis ver en las fotografías y vídeos que he publicado en mi Twitter, contaba con tres garajes para los tres coches del equipo pilotados por Esapekka Lappi, Jari-Matti Latvala –ambos finlandeses– y el estonio –región de la antigua Unión Soviética, al lado de Finlandia–, Ott Tänak. Tres pilotazos, que además han demostrado un altísimo nivel en el Rally, una de las pruebas más difíciles, si no la más difícil de todo el Mundial.

Service park: llegada de los ídolos locales!! @toyota_esp#WRC#Toyota#RallyFinland pic.twitter.com/g7WyIsP6mc

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) 28 de julio de 2018

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Una vez acabado el día del #RallyFinland #WRC : 45 minutos para reparaciones en cada coche ¡de reloj! 4 mecánicos por coche (brazalete naranja) Experiencia alucinante, la verdad. Y mañana mucho más!!@Toyota_Esp @SoyMotor @SoyMotorCoches pic.twitter.com/rknd5Y257y

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) 27 de julio de 2018

Permitidme un paréntesis para explicar qué es el equipo Toyota Gazoo Racing del WRC y cuál es su sede. El equipo tiene, precisamente, la sede en Finlandia y es dirigido también por un finlandés, Tommi Mäkinen, cuatro veces Campeón del Mundo de Rallies y ganador del Mil Lagos también en cuatro ocasiones. Un equipo compuesto por dos finlandeses y un estonio. Así que es, sin lugar a dudas, como mostraron los aficionados finlandeses y estonios, estábamos con la escuadra local.

Una leyenda viviente 4 veces Campeón del Mundo y Team Principal de @Toyota_Esp Tomi Makkinen!! #WRC pic.twitter.com/RcLXgmp4hi

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) 27 de julio de 2018

El actual presidente de Toyota, Akio Toyoda –un personaje que en Japón tiene casi el mismo tratamiento del Emperador–, es íntimo de Mäkinen, según nos contaron miembros del equipo. En principio, Toyota pensó en montar la base del equipo en Colonia, Alemania, donde tiene sus instalaciones europeas de competición, pero la amistad entre ambos personajes hizo que Toyoda diera completa libertad a Mäkinen para hacer y deshacer a su antojo. Éste lo hizo y decidió montar la estructura de competición en su país, y con pilotos locales.

Esto es hacer el equipo de sus sueños a su imagen y semejanza. Y vaya con qué resultados, pues Toyota empieza a ser una estructura de competición de Rallies de primer orden, firme candidata a la victoria en las próximas temporadas, como ya hacen este año con frecuencia ascendente.

Volvamos a la visita con el ingeniero después de este excurso. Pudimos ver cómo cada box contaba con un reloj con una cuenta atrás para hacer los trabajos en los coches.

Visita a las entrañas del Toyota Gazoo WRC. Foto: Nuno O'Niel

El coche tiene que llegar a la asistencia por sí mismo y sólo hay tres momentos al día de 30 minutos, 15 y, al final de la sesión, de 45 minutos donde el coche puede repararse por sólo cuatro mecánicos. Cada coche tiene ese tiempo máximo de asistencia diario, pero el equipo puede hacer uso de ese tiempo global como desee, pasándose minutos de un coche a otro, si es necesario, según las reparaciones que hacer, y comenzando por el coche que más interese trabajar: quizás el más dañado, quizás el que más opciones de ganar tiene. El equipo decide cómo distribuye su tiempo de trabajo permitido entre los tres coches. Pasarse del mismo implica, por supuesto, una penalización.

Antes de comenzar a trabajar en el coche, el equipo se organiza, pone un cordón alrededor de la montura, se establece el orden de trabajo y, tras ello, una vez que se toca el coche, comienzan las reparaciones frenéticas.

Todo ello bajo la atenta mirada de decenas de fanáticos, que ven cómo se realizan todos los trabajos, mientras jalean al equipo, lo animan y también a los pilotos. Impresionante la afición finesa en este sentido, el fervor por el equipo local y también por los otros competidores. Así, la cercanía y la transparencia de este deporte lo hacen más que recomendable para todos los locos del motor, algo que ni de lejos, ni aún siendo periodista y con pase de prensa, puedes vivir en la F1. Un gran punto a favor de los rallies.

Una vez concluido el tiempo máximo de reparación, el coche debe quedar custodiado por la FIA en el parque cerrado.

La pregunta es: ¿cómo se pueden hacer reparaciones en un coche con la caja de cambios rota, con la dirección reventada, con los palieres tocados o el suelo muy maltrecho?

Pues bien, todo esto lo pudimos ver en la visita junto a un ingeniero de Toyota, quien nos mostró cómo cada parte del coche está completamente estandarizada para ponerla y quitarla en cuestión de minutos: me refiero a todo el sistema de la transmisión –había tres por coche– que no se reparaba durante el rally, sino que se pone y quita por completo. Lo mismo con la columna de dirección, el motor o cualquier parte de la suspensión, diversos fondos planos –hecho de aluminio tremendamente resistente, pero al mismo tiempo muy ligero–, que se cambiaban según el conjunto del tramo del día, las preferencias de setup del piloto o el daño que pudiera tener en el mismo.

Por eso, estos coches cuestan unos 700.000 euros por unidad, porque están diseñados para repararse con todo este conjunto de piezas en cuestión de minutos, de ahí el increíble esfuerzo de diseño hecho por los equipos del Mundial de Rallies.

Incluso nos contaron que cualquier parte hidráulica del coche no necesitaba ser cambiada en su totalidad, sino que cada parte del sistema era independiente y sólo había que sustituir la parte dañada y unirla con el resto del sistema. Ni siquiera con los circuitos de aceite era necesario drenar y reparar todo el sistema, sino únicamente el conducto dañado; o cambiar los manguitos perforados en el caso de los sistemas hidráulicos, pero nada más. Muy interesante.

 

EL COCHE

Unos 380 caballos es la potencia máxima de estas bestias, que sacan el máximo rendimiento, no sólo del motor turbo 1.6, sino también del gran desarrollo aerodinámico que tienen estas monturas.

Una de las cosas más interesantes en la conversación con el ingeniero de Toyota fue la que correspondió a la aerodinámica donde, como era de esperar, le interrogué por cada pequeño detalle del coche.

Foto: Raúl Molina.

Cuenta con un alerón trasero muy potente, con un morro –el frontal en los coches de calle–, dotado de una serie de deflectores laterales, que según nos confirmó el ingeniero, aumentan la carga aerodinámica delantera, pero también el efecto suelo por debajo del coche. Tienen una función específica en el Rally Mil Lagos, elevar la parte delantera del coche durante los vuelos en los brutales saltos que tenemos en esta prueba, para hacer que el coche caiga de atrás y no de delante, lo que favorecería el vuelco del coche. En definitiva, deflectores para volar mejor. Alucinante.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

Por supuesto, el resto del coche desde el punto de vista aerodinámico es espectacular, con carrozados en las aletas de las ruedas delanteras, pero con salidas para sacar el flujo de aire de éstas hacia atrás, entradas NACA para llevar este aire hacia atrás y a la refrigeración, por ejemplo, de los frenos traseros y numerosos elementos en el chasis para llevar el flujo de aire hacia el alerón trasero con el efecto Coanda, que pega una corriente aerodinámica al elemento que la conduce.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

Destacar la parte trasera de estos coches, sobre todo en el caso del Toyota, cuyas soluciones han sido copiadas por otros equipos, como Citroën a partir de este Rally, lo que les ha facilitado acabar segundos con Mads Østberg. Se trata de un espectacular difusor con deflectores inferiores para provocar el mayor efecto suelo a través del fondo plano de aluminio, además de salidas posteriores con deflectores tras las ruedas traseras para extraer el flujo de aire de las mismas y provocar un mayor efecto suelo y, con él, un aumento de la carga aerodinámica.

Foto: Raúl Molina.

El coche parte de un chasis de serie; el del Yaris en el caso de Toyota, pero todo hecho en fibra de carbono de panel de abeja, como en las competiciones de monoplazas.

Pudimos ver cómo era cada pieza aerodinámica por dentro, pero sólo pude fotografiar la parte externa, la visible, como es lógico para no enseñar secretos de Toyota. Por supuesto, esta aerodinámica no está sometida a un desarrollo cada carrera como en la F1, lo que dispararía los costes, sino que la evolución está limitada, con no más de tres desarrollos por temporada. Lo mismo ocurre con el motor, el turbo y muchas otras piezas. Una buena manera de atraer fabricantes, mantener un alto nivel de competición y de tecnología.

Como muchos de vosotros sabéis, en el WRC tenemos cuatro categorías –WRC, WRC2, WRC3 y JWRC–, cuyos datos técnicos son los siguientes:

 

WRC

Categoría reina del WRC, con los pilotos de mayor prestigo.

Los cuatro fabricantes principales y sus monturas son éstas: 

• Ford Fiesta WRC,
• Citroën C3 WRC,
• Hyundai i20 Coupé WRC y
• Toyota Yaris WRC

Datos técnicos

• Motor: 1.6 litros, inyección de combustible, turboalimentado, motores de cuatro cilindros equipados con una brida restrictiva de aire de 36 milímetros.
• Potencia: 380 caballos.
• El bloque de cilindros tiene que provenir de los coches de serie.
• Se permiten cambios importantes en los cigüeñales, bielas, pistones, camisas de cilindros, válvulas y árboles de levas.
• Transmisión permanente a las cuatro ruedas, caja de cambios secuencial de seis velocidades con cambio de levas en la dirección.
• Diferenciales mecánicos delantero y trasero. Diferencia central activo.
• 7 x 15 pulgadas para las llantes de tierra, 8 x 18 pulgadas para las llantas de asfalto.
• 300 milímetros de diámetro para los frenos en pruebas de tierra, 370 milímetros para rallies de asfalto.
• Peso: 1.190 kilos mínimo, 1.350 kilos con piloto y copiloto.
• Aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en menos de 4 segundos.
• Velocidad máxima superior a los 200 kilómetros/hora.

 

WRC2

Ésta es la principal categoría soporte del WRC y el último peldaño de los pilotos antes de llegar a la clase reina.

Se trata de coches con tracción total. Sin embargo, se permiten diversas categorías.

Esta categoría se equilibra tanto con la potencia como con lastres de peso.

Los coches de la misma son:

• Ford Fiesta, 
• DS 3, 
• Peugeot 208 T16,
• Skoda Fabia, 
• Hyundai i20.

 

WRC3

Categoría de dos ruedas motrices.

Los coches son los siguientes:

• DS 3 R3T y R3-MAX,
• Peugeot 208 R2,
• Toyota GT86 R3 y
• Renault Clio R3T. 

 

JWRC

El Campeonato del Mundo de Rallies Júnior de la FIA es una categoría de promoción para los más jóvenes que se inician en los rallies.

Todos los competidores pilotan los Ford Fiesta R2T de 1.0 litros turboalimentados preparados por el equipo de campeón del mundo de pilotos y marcas, M-Sport.

El campeonato consta de cinco citas: el Rally de Suecia, Córcega Portugal, Finlandia y Turquía.

 

LA AFICIÓN

Uno de los aspectos que más me impresionaron del Rally fue la afición finesa. No es de extrañar que esta competición sea deporte nacional junto al hockey sobre hielo, pues el país entero se vuelca en el Mil Lagos.

Todos y cada uno de los tramos estaban llenos a rebosar, el service park siempre abarrotado, las banderas finesas, suecas y estonias ondeaban por todas partes. Y los aficionados desde primera hora de la mañana –aprovechaban que el sol sale a las 4:30 de la mañana y no se pone hasta bien pasada la medianoche– ya en los tramos para vivir lo más de cerca posible la alucinante experiencia.

Foto: Raúl Molina.

Eso sí, bien ordenados, bien educados y muy tranquilos, ¡a pesar de haber bebido ya muchas cervezas! En otras latitudes esto hubiera sido un desmadre. Muchos españoles podían encontrarse entre el público y, muchos de ellos, sólo desplazados para disfrutar de esta experiencia altamente recomendable. Sea como fuere, daba gusto estar entre tanto loco por el motor.

Entre la afición hay que destacar al mismísimo Akio Toyoda, que mostró ser un fanático de los coches y de este rally, el de casa para Toyota. Por cierto, sobresaliente fue también su cinturón con una enorme hebilla con su cara esculpida. Todo un crack, cuya pasión por el motor es digna de admirar, así como su naturalidad.

También pudimos ver entre los invitados de Toyota a Kazuki Nakajima y Kamui Kobayashi, quienes debieron disfrutar de lo lindo con esta experiencia, tan distinta a la que ellos viven en los circuitos.

>Foto: Iván Fernández.

 

EL RALLY Y LOS TRAMOS

Uno de los aspectos que más me han impresionado del Mundial de Rallies es la espectacularidad de las pruebas, la cercanía con el público, la competitividad entre los pilotos, la importancia de las manos de éstos, de su pilotaje. He de confesar que yo me inicié –alguna vez lo he contado– en el mundo del motor con los rallies junto a mi padre, que por aquel entonces era jefe de cronometradores de la Federación Andaluza de Automovilismo. Pero, al final, la fascinación que sentimos todos por la F1 me hizo volcarme más en las pruebas de los circuitos que en otro tipo de categorías.

Y la verdad es que ahora siento con mucha más fuerza este 'veneno', esta pasión, justamente después de haber estado a pie de tramo –de muchos tramos– disfrutando de este espectáculo tan barato, tan recomandable y que a todos nos suele pillar bastante cerca. Un rally regional o incluso del WRC no nos queda tan lejos y creo que nos puede proporcionar un fin de semana de ensueño. Así que ahí dejo mi recomendación. A mí, si puedo, me vais a ver más en estas pruebas ¡y dejaré constancia por aquí!

En el caso de Finlandia, tuvimos un programa muy intenso que nos permitió ver de todo: tramos abarrotados, tramos de grandes derrapadas, muy veloces, los saltos más grandes –llevo soñando cada noche con ellos desde que volví de este viaje–… es decir, todo lo que uno espera del Mil Lagos. Bueno, y también ¡lagos para aburrir! El país tiene, según dicen los fineses, 180.000, ni más ni menos.

No pudimos trasladarnos en helicóptero a los tramos debido a los grandes incendios en Suecia, lo que llevó a Toyota a enviar sus helicópteros –los de la compañía que trabaja con ellos– a ayudar en las labores de extinción. En el fondo, esto nos permitió conocer mejor la región y 'patearla' bien.

Nuestra experiencia comenzó con el impresionante tramo urbano de Harju, con una bajada de locura, con chicanes con balas de paja, con zonas rapidísimas y paellas memorables y muchos finlandeses hartos de cerveza, pero –repito– tranquilos y educados. Mujeres, niños y hombres estaban en cada hueco que dejaba el tramo, gente de todas las edades. Y, lo más alucinante, esas familias llevando a los niños desde bien pequeños para que desde la más temprana edad les entre la 'enfermedad' de la velocidad, como tantas veces repite Albert Fàbrega. Sentí envidia, y mucha.

El Yaris en Harju. Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

El sábado comenzó nuestro periplo por los bosques, las pistas y los lagos en cada uno de los tramos. Me quedo con el tramo de alta velocidad de Kakaristo, con las derrapadas en la zona VIP de Toyota en Tuohikotanen, donde vimos dos pasadas memorables y los vuelos más alucinantes que he visto en mi vida –muy, muy cerca de los coches– en Paijala. El domingo disfrutamos, de nuevo, de los saltos –todavía se me pone la piel de gallina recordándolos– en Ruuhimäki, donde también se celebró el Power Stage del Rally, que ganó el estonio Tänak para locura de sus seguidores allí presentes.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

En cualquier caso, si alguna vez podéis ir de vacaciones a Finlandia plantearos hacerlas coincidir con el Rally, pues es una experiencia mágica, después de la cual –o antes– puede disfrutarse de un país que, a mi parecer, es maravilloso y con una gente estupenda y tranquila.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

Foto: Raúl Molina.

Una leyenda viviente 4 veces Campeón del Mundo y Team Principal de @Toyota_Esp Tomi Makkinen!! #WRC pic.twitter.com/RcLXgmp4hi

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) 27 de julio de 2018

Ruuhimaki!!!@Toyota_Esp#WRC#Toyota#RallyFinland pic.twitter.com/UE1AAW4aKc

— Raúl Molina Recio (@RaulMolinaRecio) 29 de julio de 2018

Foto: Raúl Molina.

 

LOS RESULTADOS

Repasamos algunos de los resultados principales de este Rally, para ir concluyendo esta visión general a este viaje tan alucinante, que recomiendo a todo el mundo.

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