¿Adelanto o retraso de la chispa? Efectos derivados de un encendido incorrecto

Las mecánicas de combustión son unos conjuntos de mecanismos relativamente sencillos, que no simples, en su teoría de funcionamiento. La energía de una serie de explosiones controladas se aprovecha para generar un movimiento que impulse al vehículo. No obstante, para llevarlo a la práctica y que todo ello sea eficaz y eficiente requiere de una serie de mecanismos secundarios y subtareas que complican el asunto. En los motores de gasolina, las explosiones son provocadas por una chispa generada en el momento óptimo –situación del pistón, dosado y homogeneidad de la mezcla de aire y combustible, cruce de válvulas, etc.–. Actualmente la electrónica es la que juega el papel de controlar todo ello pero, ¿qué ocurre en el caso de que la chispa no salte en ese momento óptimo? Para empezar, debemos definir cuál es nuestra referencia de tiempo. Por norma general, ésta se establece cuando el pistón alcanza el Punto Muerto Superior –PMS– justo antes de comenzar a bajar. Aunque puede haber regímenes y condiciones de funcionamiento en que se busque adelantar o retrasar la chispa, una desincronización no buscada o mayor de la planeada puede acarrear ciertos problemas.

RETRASO DE LA CHISPA En este caso, la chispa salta cuando el pistón ya se desplaza hacia abajo en la cámara de combustión. Bajo estas condiciones, la presión en el cilindro es mucho menor tanto en el momento de la ignición como instantes después. Esta presión reducida tiende a disminuir la eficiencia térmica del motor. Cabe explicar que la eficiencia térmica marca el ratio de la cantidad de energía aprovechable del combustible. Actualmente, este ratio se encuentra en torno a un 30%, aunque hay estudios que buscan elevar este valor hasta el 50%. Por supuesto, el hecho descrito repercutirá en una reducción de las prestaciones, así como en un incremento notable en el consumo de combustible y en el calor a disipar por el sistema de refrigeración.

a) Sin chispa    b) Adelantado excesivo    c) Encendido óptimo    d) Retraso de encendido

ADELANTO DE LA CHISPA Es en esta situación donde podemos dar más juego al asunto, y es que sí que es recomendable otorgar un poco de avance a la chispa. Es cierto que el pistón encontrará cierto grado de resistencia al avance hasta su PMS con los gases en plena combustión, pero a cambio, la presión y la temperatura del cilindro serán más elevadas a la hora de comenzar su desplazamiento hacia abajo, lo que elevará la eficiencia térmica más incluso. Por supuesto, hay que llevar cuidado de no adelantarlo demasiado, pues se corre el riesgo de generar detonaciones previas no controladas que provoquen el temido picado de biela. Hay diversos factores que pueden afectar la ventana de tiempo para el adelanto de chispa, aunque el más determinante es sin duda el tipo de combustible y su octanaje.