Tras Zandvoort, ¿habrá tentación de recuperar el oval de Monza?

El agrio porque el circuito de Países Bajos no permite adelantamiento salvo que haya una diferencia de prestaciones entre un coche y otro. La corta recta es insuficiente para que el DRS sea efectivo; se necesita toda la curva 14 con DRS, pero entiendo que, sin experiencia previa, la FIA tomara precauciones. Pero un agrio mitigado porque se vieron algunos lances interesantes.

Por eso el lunes, al comentar con algunos amigos la carrera, entre birritas y en mi caso Coca-Cola, y hablar de lo que podemos esperar este próximo domingo en Monza, uno de ellos lanzó una pregunta: "¿Y si recuperáramos los peraltes de Monza?".

Monza y el efímero Avus han sido los únicos circuitos con auténticas curvas peraltadas. No conozco la curva peraltada de Avus, que se conserva en un área de servicio de la autopista. Sí las de Monza. Con ocasión del Gran Premio de Italia es habitual visitarlas a pie, subir por su peralte, hacerse una foto de recuerdo… –aunque a mí nunca me han llamado la atención y tengo muy pocas fotos de cuando iba de enviado especial al Mundial–.

Obviamente el óvalo de Monza está deteriorado. Necesitaría no sólo un nuevo asfalto y replantear las protecciones, tarea esta última casi imposible: si en Zandvoort encontrábamos los peraltes hechos sobre terreno natural… los de Monza están en el aire, como los de Terramar; reposan sobre pilares y un coche que se escape por la parte alta del podio… simplemente vuela al vacío… o rebota hacia el interior por obra y gracias a las barreras.

Nunca he visto un Gran Premio en el óvalo de Monza. Sólo se empleó en cuatro ocasiones: 1955, 1956, 1960 y 1961 –en 1957, 1958 y 1959 se usó el trazado 'plano', es decir, el actual pero desprovisto de chicanes. Por entonces no había tele y yo prácticamente no seguía aún las carreras.

Sí que tengo imagen de él en los 1.000 kilómetros de Monza porque el trazado largo, el de poco más de diez kilómetros, con sus peraltes, se seguía usando para esta prueba y entonces ya comenzaba a comprar 'Autopista' y 'Velocidad', las dos revistas nacionales del momento, así como 'L'Automobile' y 'Sport Auto', que un día descubrí que vendían en un kiosco cercano al cole.

De vuelta al óvalo de Monza, mi amigo decía que sería curioso ver cómo corrían en paralelo por la misma recta los pilotos que van a entrar en el óvalo y los que salen de él.

No debería haber mucha diferencia entre los 18-19º del peralte de las curvas 3 y 14 de Zandvoort con los 21º de Monza. Claro que el radio de esas medias circunferencias peraltadas italianas permitirían una velocidad alucinante, mucho mayor que los de Países Bajos por supuesto.

Quizás podría suceder lo mismo que en una carrera de Indy Racing League en Texas hace unos años, en la que los pilotos se mareaban y sufrían vértigos a las pocas vueltas; las fuerzas G eran excesivas y, tras los primeros entrenamientos, se supendió la carrera.

• La IndyCar también tuvo su carrera de la vergüenza

Un detalle a no olvidar. El óvalo de Monza dejó de usarse en los 1.000 kilómetros tras la edición de 1969, pero ya desde hacía cuatro años se habían introducido chicanes antes de entrar en los peraltes para aminorar la velocidad.

Frente a Monza, los peraltes de Indy son ridículos, sólo 9º y los de Monza lo eran con respecto al de Avus, de nada menos que 43º, superior a Daytona, que está sobre 31º.

No, no recuperaremos los peraltes de Monza… pero no me extrañaría que en algún circuito los viéramos… quizás en la curva de La Caixa en Montmeló, por ejemplo –es un decir–.