El adelantamiento de Sainz que me recordó a Brasil 2008

A mitad de la última vuelta de carrera no sólo superó a Nico Hülkenberg sino que resistió a Daniel Ricciardo y sumó el punto decisivo que le permitía superar a Pierre Gasly. Un adelantamiento antológico.

• VÍDEO: El adelantamiento de Sainz a Hülkenberg

Hasta aquel momento, Carlos no estaba en situación de superar por puntos a Gasly. Ambos estaban fuera de los puntos e igualados en el Campeonato, pero Pierre tenía un segundo puesto –el de Brasil– que le daba la primacía porque el mejor resultado de Carlos era asimismo el de Brasil, pero tercero.

La situación me recordó mucho a otra que vivieron en el muro de McLaren en 2008, cuando Lewis Hamilton se proclamó campeón en la última vuelta superando a Timo Glock y su Toyota en Brasil… Mientras, en Ferrari, Felipe Massa, que había cruzado ya la meta, celebraba el que pensaba era ya su título. Glock había decidido mantener las gomas de agua, sin parar a cambiarlas en los últimos giros, como situación desesperada para sumar algún punto pese a que había parado de llover.

McLaren decidió parar a Lewis a falta de cinco vueltas para el final… y Glock se colocó tercero, por delante de Hamilton y Sebastian Vettel. Dos vueltas después, Vettel superó a Lewis y dejaba a éste sin título en beneficio de Massa… pero Glock estaba ya sin gomas y no pudo soportar la presión de Vettel ni la de Hamilton. A falta de media vuelta, Lewis logró el adelantamiento definitivo… Mientras el techo del box 'se desplomaba' sobre la familia de Massa y los hombres de Ferrari, que no creían lo que habían visto… y las lágrimas afloraban en el rostro de Felipe cuando le informaron que el título –que ya celebraba– no iba a ser suyo.

Curioso: en ambas carreras hubo una parada para cambiar neumáticos decisiva, pero los adelantamientos fueron muy distintos. El de Hamilton fue fulminante porque en esas vueltas Glock era unos diez segundos más lento. El de Carlos fue un adelantamiento sí o sí, peleado, en dos tiempos, frente a una resistencia feroz; un auténtico 'chef d’oeuvre' que da mucho más valor al sexto puesto.

Quizás entró en juego la rabia, el amor propio o el orgullo de quien a media carrera parecía que lo tenía todo perdido. Cuando le dijeron a Carlos, a media carrera, "con estas gomas, no creemos llegues al final", fue como una ducha helada. Una parada más podía ser el perderlo todo… aunque los Renault también tuvieron que hacerla, afortunadamente. La verdad es que me sorprendió la primera parada de Carlos; fue inusualmente temprana para él y despertó la alarmas.

Ha sido un broche de oro a una temporada que ha hecho de Carlos el 'tercer hombre' de la parrilla. Sólo Verstappen y Hamilton cotizan por delante de él. Hará bien McLaren en amarrarlo ya si quiere conservarlo para 2021… porque está en situación de dejarse querer.