Gran fin de semana para Ferrari en Baréin, que suma su segunda victoria consecutiva y Sebastian Vettel es más líder del campeonato. Precisamente ese esfuerzo y talento de la formación italiana lo ha sacado a relucir Sergio Marchionne.
A muchos aficionados les habrán sorprendido las palabras de Damon Hill acusando a Ferrari y Mercedes de estar 'matando' la Fórmula 1 por intereses egoístas, por defender su posición de predominio.
Ferrari ha sido el gran vencedor del Gran Premio de Australia. Las apuestas de la primera carrera de la temporada 2018 daban como gran favorito a Mercedes y a Lewis Hamilton, pero la suerte y la estrategia han sido claves para que Sebastian Vettel consiga la primera victoria del año.
Los nuevos cambios que ha introducido Liberty Media han tenido una gran acogida entre el paddock de la Fórmula 1 durante este último año. Sin embargo, no todos han recibido con buenos ojos las novedades de los nuevos dueños del Gran Circo.
Las que tienen los de la escudería Red Bull ante lo que está sucediendo con la renovación del contrato de Daniel Ricciardo y es que por parte del piloto, como así lo ha manifestado en varias ocasiones, no tiene la menor prisa en rubricar su continuidad, con el fin de valorar sus posibilidades.
El jefe de Mercedes en la Fórmula 1, Toto Wolff, está convencido de que las amenazas de Sergio Marchionne, centradas en una posible escapada de Ferrari hacia un campeonato paralelo, no caerán en saco roto.
Sergio Marchionne cree que el Ferrari SF71H es un coche ganador y remarca que ha gustado tanto a Sebastian Vettel como a Kimi Räikkönen, por lo que no ve motivos para que la Scuderia no disfrute de una buena temporada en las posiciones más altas de la parrilla.
Mercedes, Ferrari y McLaren han metido prisa, en los últimos días, a Liberty Media para que aclare la normativa que habrá a partir de 2021. Los nuevos dueños de la Fórmula 1 tienen delante de ellos una oportunidad para mejorar el deporte al término del vigente Pacto de la Concordia, que traerá nuevos aires, seguro, al Gran Circo.
El presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, ha vuelto a amenazar con sacar a la Scuderia de la Fórmula 1 si no llegan a un acuerdo con los dueños nuevos, Liberty Media, sobre los cambios que debe haber en el futuro en el deporte.
El presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, ha vuelto a atacar a la gestión de Liberty Media, esta vez desde Ginebra, con motivo del Salón del Automóvil.
El jefe de Red Bull, Christian Horner, cree que existe una relación muy estrecha entre Mercedes y Ferrari, con actuaciones que trascienden más allá de la propia esfera directiva. Más leña al fuego de la batalla política que ya existía en la Fórmula 1 y que se ha vuelto a avivar en los test de pretemporada.
Ferrari sufrió varios problemas de fiabilidad en 2017 que le hicieron distanciarse de sus máximos rivales, los de Brackley, y perder las opciones de ganar los títulos. El jefe de Mercedes, Toto Wolff, asegura que no se puede culpar al estilo de gestión de Sergio Marchionne de su derrota el año pasado.
Sergio Marchionne coquetea con la posibilidad de que Alfa Romeo entre en la IndyCar con su equipo oficial. El máximo responsable del grupo Fiat-Chrysler ha planteado esta posibilidad durante el Salón del Automóvil de Detroit.
Es lo que hizo un joven piloto canadiense al constatar la importancia de algo que mueve el mundo desde épocas muy remotas, más si cabe, cuando hablamos de un deporte elitista, en el que muy pocos tienen cabida, dado el reducido número de plazas disponibles.
El presidente de Mercedes, Dieter Zetsche, se describe a él mismo y a Sergio Marchionne como "el policía bueno y el malo", a raíz de las recientes quejas y amenazas de este último. Seguro que ninguna de las compañías que llevan seguirá en Fórmula 1 si llega un punto en el que no les interese hacerlo, pero han decidido adoptar estrategias diferentes.
