GP DE CANADÁ F1 2022

Wolff acusa de "patéticos" y "falsos" a sus rivales en la lucha por paliar el rebote

19/06/2022 02:43

El rebote de los monoplazas está dando mucho que hablar esta temporada. Ahora, Toto Wolff, jefe de equipo de Mercedes, ha acusado al resto de directores de escuderías de impedir que las medidas de la FIA contra el 'porpoising' funcionen. 

La FIA anunció antes del Gran Premio de Canadá que iba a tomar medidas contra el 'porpoising', ya que este es perjudicial para la seguridad de los pilotos. Pero esta decisión no fue aceptada de buen gusto por todos los equipos, pues consideran que es cuestión de cada uno solucionar sus problemas, mientras que otros como Mercedes —que es el monoplaza que más lo sufre— la han aplaudido.

Según publica el medio británico BBC, estas opiniones contrapuestas han quedado reflejadas en una reunión organizada durante el fin de semana en Canadá, en la cual los jefes de equipo han mostrado posiciones muy diferentes al respecto. Especialmente, los responsables de Mercedes, Red Bull y Ferrari.

"Este es un deporte donde intentas mantener una ventaja competitiva o ganarla, pero esta situación ha ido demasiado lejos", ha afirmado Toto Wolff en palabras que publica la BBC.

"Todos los pilotos, al menos uno de cada equipo, han dicho que tenían dolor después de de Bakú y que tenían dificultades para mantener el coche en la pista o la visión borrosa, no sólo hablo de Mercedes, todos los coches sufrieron de alguna forma en Bakú y lo siguen haciendo aquí", ha asegurado Wolff.

Así pues, Wolff ha tachado al resto de jefes de equipo de "patéticos" y "falsos", al considerar que manipulan la normativa a su favor y que han puesto trabas para solventar este problema. "Los directores de equipo han tratado de manipular lo que se dice para mantener su ventaja competitiva y han tratado de jugar a juegos políticos cuando la FIA ha intentado encontrar una solución rápida", ha explicado.

"El coche está demasiado rígido o rebota, como quieras llamarlo. Este es un problema conjunto que tenemos en la Fórmula 1. Es un problema de diseño que debe resolverse", ha indicado.

"Tendremos efectos a largo plazo que ni siquiera podemos juzgar y en cualquier momento esto es un riesgo para la seguridad. Luego, inventar pequeñas manipulaciones en el fondo o susurros chinos o informar a un conductor es simplemente lamentable", ha añadido.

En un principio, la FIA había comunicado a los equipos que medirían los niveles de rebote y tomarían medidas al respecto en este mismo Gran Premio, pero finalmente no será así y sólo se dedicará a monitorizarlo