Kvyat critica el halo: "Ya tenemos seguridad en la F1; no es necesario"

La mayoría de pilotos, muchos de ellos inicialmente escépticos con las bonanzas del halo, se han apresurado a defender su implantación al reglamento tras probarlo en algunas sesiones de entrenamientos libres. Las complicaciones para salir del coche siguen vigentes con una barra vertical atravesando la parte frontal del habitáculo, aunque la FIA se ha comprometido a estudiar sistemas de extracción más eficientes de cara al 2018. Conscientes de que el halo puede suponer un obstáculo a la hora de agilizar la asistencia médica tras un accidente, algunas voces como Sainz, Alonso y Button han hecho un llamamiento al optimismo y coinciden en que su llegada a los monoplazas actuales no alteraría la visión desde dentro del habitáculo. 

La defensa del halo como un elemento capaz de aumentar la seguridad de los pilotos es unánime, al igual que las críticas hacia su "feo" aspecto en los monoplazas actuales, tal y como lo describió Sebastian Vettel en los test invernales. Para los agentes responsables del deporte, la apariencia juega un papel marginal respecto a la necesidad imperiosa de evitar mayores fatalidades en pista, aunque existen voces favorables a cancelar su llegada en 2018 por romper con la esencia histórica de la Fórmula 1. A este grupo de presión, capitaneado por Nico Hülkenberg desde hace meses, se ha unido ahora Daniil Kvyat, quien disputó ayer dos vueltas con el halo durante los Libres 1 del Gran Premio de Estados Unidos.

En declaraciones a la prensa trasladada a Austin, el piloto de Toro Rosso manifestó el mismo diagnóstico que otros pilotos respecto a la buena visibilidad, si bien no dudó en exponer su rechazo a implantarlo definitivamente en los monoplazas del próximo año. "He probado el halo en los Libres 1 y creo que no hay implicaciones en la visibilidad. Obviamente, es un elemento válido, pero en mi opinión ya hay suficiente seguridad en la Fórmula 1", apuntó Kvyat, quien zanjaba su argumento con una rotunda advertencia a los máximos responsables del deporte."No lo necesitamos", subrayó. La F1 se enfrenta a un dilema que ya resumió Valtteri Bottas en el pasado mes de marzo, cuando aún no se estudiaba seriamente la posibilidad de implantar el halo a corto plazo. "Es feo, pero necesario", confesó el finlandés. El orden de prioridades entre ‘feo’ y ‘necesario’, protagonista en la batalla mediática, fracciona a un deporte cada vez más indeciso sobre el rumbo de su negocio.