Fernando camaleón Alonso: el hombre de los 1.001 estilos de pilotaje
Fernando Alonso no cree que tenga un estilo de pilotaje específico, más bien se trata de alternar diferentes tipos de pilotaje en función de las necesidades del monoplaza y de la fase de la carrera en la que se encuentre. Esa es su principal fortaleza y una de las claves de su rápida adaptación a cualquier coche y categoría.
Cada piloto suele tener un estilo de conducción particular. Sin embargo, ese no es el caso de Fernando Alonso según Alan Permane, jefe de operaciones de Alpine. Permane piensa que el español no tiene un estilo de pilotaje definido.
El español le da la razón a Permane y confiesa que no tiene ningún estilo de pilotaje característico, pues la forma de conducir varía dependiendo de sus sensaciones y de las prestaciones del monoplaza.
"Creo que Alan tiene razón. No tengo un estilo de conducción específico. Hay cosas que quiero sentir en el coche. Cuando todo es perfecto, soy agresivo. Si la parte trasera se agarra, me gusta pilotar. Si ese no es el caso, cambio mi estilo", ha afirmado Fernando en una entrevista a la publicación alemana Auto Motor und Sport.
No sólo depende de la configuración del monoplaza, ya que Fernando recuerda que el mismo coche cambia de forma constante durante una misma carrera. La salida se toma con neumáticos nuevos y alta carga de combustible, pero el pilotaje no es el mismo cuando las gomas se degradan o cuando el tanque está prácticamente vacío. Alonso cree que saber identificar esto para adaptar su estilo es su principal fortaleza.
"El domingo el coche cambia constantemente. Comienzas con 100 kilogramos, paras con poca gasolina. Primero tienes neumáticos nuevos, luego se desgastan. Pilotas a través de muchas fases diferentes, necesitas diferentes estilos de conducción durante la carrera. Esa es probablemente mi fortaleza", ha añadido Fernando.
Más allá de tener o no un estilo característico, el asturiano lo que necesita es sentir con el volante cómo están los neumáticos delanteros, pues son sus 'ojos' en la pista. Por eso, al comienzo de su adaptación con Alpine, pidió una dirección asistida más dura.
"Mi estilo de conducción, e históricamente siempre se ha visto en las on-board, era dar un volantazo en la entrada de la curva. A partir de ahí, yo iba sintiendo lo que hacían las ruedas delanteras. Si el volante se ponía más blando, es que estaban cediendo. Si se ponía más duro es que tenían demasiado agarre y que la parte posterior te iba a dar un latigazo tarde o temprano", confesó el pasado mes de julio en una entrevista exclusiva con SoyMotor.com.
"Yo normalmente lo siento todo con las manos y el tren delantero. Si eso te lo quitan, yo estoy muerto", agregó.
"Otros pilotos no, porque conducen el coche con el cuerpo o con otras cosas, pero a mí si me quitan las ruedas delanteras estoy indefenso en una curva sobre lo que va a hacer el coche. No lo puedo predecir. Hemos trabajado en ese sentido a la hora de tener mucho feeling con el volante", indicó Fernando para cerrar.
