Brawn, con razones "tangibles" para creer que la F1 mejorará en 2019

En 2021 finaliza el Pacto de la Concordia, momento en el que se espera que la Fórmula 1 dé un paso al frente en cuanto a innovaciones en monoplazas y reglamento. 'La nueva F1', como muchos ya la empiezan a catalogar, depende en buena medida de lo que suceda hasta 2020.

Por ahora, sabemos que una de las prioridades de cara al próximo año se centra en simplificar las piezas aerodinámicas, con el fin de facilitar los adelantamientos en cada Gran Premio.

"En Brasil vimos que cuando se juntan dos coches con un nivel de rendimiento similar, el adelantamiento es casi imposible, por lo que nos lleva a pensar en cómo facilitar el movimiento de un monoplaza con respecto al que tiene delante. A pesar de todo, los cambios introducidos en 2018 evidencian un progreso significativo", ha afirmado Brawn al portal web Grand Prix 247.

"Hasta ahora, las simulaciones y los trabajos que hemos hecho nos muestran que los efectos son tangibles, pero está claro que la gran prueba vendrá con el GP de Australia de la próxima temporada", ha avanzado Brawn.

Sin embargo, Brawn ha querido señalar que esta temporada hubo una mejora significativa. "Este año, tuvimos algunas carreras realmente emocionantes, por ejemplo Bakú, Shanghái, Silverstone y México y estoy seguro de que habrá más de lo mismo el próximo año. Es un anticipo de lo que preparamos para 2021 y estamos satisfechos", ha añadido.

FERRARI, CON TAREA ADELANTADA

En Maranello ya trabajan para desarrollar el monoplaza del próximo curso. Tras un 2018 en el que el desarrollo del coche experimentó una notable mejoría con respecto a temporadas anteriores, Ferrari probó en Brasil un nuevo sistema de control de temperatura de sus radiadores.

Se trata de sensores colocados en uno de los pontones delanteros del coche de Kimi Räikkönen, con el fin de obtener datos que les ayuden a controlar la temperatura de sus radiadores.