Alonso y Renault: un repaso histórico

Renault volvió como equipo propio en 2002 tras comprar la fábrica de Benetton en Enstone, con la figura de Flavio Briatore al mando de la estructura francesa, un Briatore que tenía los ojos puestos en Alonso desde sus inicios en monoplazas y le facilitó el debutar en F1  con Minardi en 2001.

Alonso, sin embargo, fue reserva de Trulli y Button esa temporada y ni siquiera llegó a disputar entrenamientos libres con el R22. El primer coche de Renault que Alonso pilotó fue el R23 de 2003, con el que llegaron sus primeras alegrías y récords.

R23 – 2003

No hubo que esperar mucho para ello, y en la segunda prueba de la temporada, con el circuito de Sepang –Malasia– como escenario, Alonso se convirtió en el piloto más joven de la historia en lograr una Pole, y sumó su primer podio aquel domingo.

Sin embargo, el mejor momento del año llegó pasado el verano europeo, cuando Alonso venció en Hungría partiendo desde la Pole, en la que fue su primera victoria en Fórmula 1. Fue la primera victoria de Renault desde 1983. Renault acabó 4º el Mundial, y Alonso, 6º.

R24 – 2004

Alonso no ganó ninguna carrera en 2004, aunque Renault acabó el certamen en tercera posición y Alonso, cuarto detrás de Button y los Ferrari, para seguir la tendencia ascendente del fabricante francés.

R25 – 2005

Llegó 2005, y con el R25, el desafío último para Renault y Alonso, dado que con ese coche cortaron la mayor racha de campeonatos consecutivos de la historia hasta aquel momento, tras el dominio de Michael Schumacher y Ferrari entre 2004 y 2005.

En San Marino, en Imola, Alonso firmó aquel año una actuación para la historia al frenar los intentos de adelantamiento por la victoria de Michael Schumacher, probablemente en el día en el que se marcó un antes y un después en la trayectoria del asturiano.

Alonso se subió al podio seis veces en las primeras siete carreras del año y ganó cuatro de ellas, dos desde la Pole. Tras un par de abandonos y un mal resultado en Hungría, la temporada de Alonso y Renault rozó la perfección y a falta de dos carreras para terminar la temporada, el piloto asturiano se convirtió en el campeón del mundo más joven de la histroia, al acabar en el podio del GP de Brasil.

R26 – 2006

El R26 del año siguiente no sería peor que su antecesor, y a pesar del inicio de ruptura entre Alonso y Renault, el resultado final fue el mismo y la marca del rombo logró su segundo Campeonato de Constructores consecutivo. Alonso, sin embargo, anunció que se iba a McLaren en 2007 antes de empezar el año.

Tras habérsela negado en 2005 Kimi Räikkönen, la marea azul del Circuit de Barcelona-Catalunya vería en aquel 2006 la primera victoria de Alonso en su GP de casa, en una temporada en la que Alonso venció por primera vez en Mónaco también, cimentando la primera piedra de la Triple Corona de aquel modo.

Alonso ganó siete carreras al final de 2006 y no lo hizo en Hungría tras una remontada épica bajo la lluvia por un fallo de una tuerca. Sin embargo, si no hubiera sido por un inesperado fallo del motor de Schumacher en Japón –penúltima cita del año–, probablemente el bicampeonato no hubiera sido posible.

R28 – 2008

Tras una temporada digna de culebrón televisivo en McLaren, Alonso no tuvo más remedio que regresar 'a casa' antes de encontrar un hueco en el equipo Ferrari, y volvió en 2008 a Enstone. El R28 permitió a Renault acabar cuartos en el Mundial y Alonso ganar consecutivamente las carreras de Singapur y Japón.

En Marina Bay, Flavio Briatore y Pat Symonds dieron la orden a Nelson Piquet Jr. –compañero de Alonso– de chocar a propósito para que saliera un coche de seguridad, algo que facilitó la victoria de Alonso y sanciones posteriores a los dos 'ingenieros' del plan.

R29 – 2009

Singapur volvió a ser una buena carrera para Alonso y Renault en 2009. De hecho, fue la única en la que pudieron subirse en el podio. El equipo francés acabó antepenúltimo en el Mundial y Alonso apenas pudo entrar en el Top 10.

Tras el GP de Abu Dabi aquel año, Alonso se despidió definitivamente de la estructura de Enstone, hasta que doce años después volverían a unir lazos: "Han sido los mejores siete años de mi vida, nunca os olvidaré", citó Alonso aquella tarde otoñal.