Mayo volvió a disfrutar del Rallye Festival Hoznayo

Allí estuvo de nuevo SoyMotor.com, en este caso con Cristóbal Rosaleny a la cabeza, y la sonrisa perenne en su rostro delataba el enorme deleite que supone estar en los preciosos tramos de Cantabria con esas reliquias en plena faena. Es difícil olvidar el rugido de esas bestias y el gran ambiente que se vive en un evento de estas características.

Se trata de un espectáculo sin igual. Cantabria –y sobre todo Hoznayo– se viste de gala para recibir con los brazos abiertos a bólidos y pilotos de todas las épocas. Desde un Seat 600 hasta un Toyota Celica GT-4 ST165, sin olvidarnos de los veneradísimos vehículos del Grupo B y hasta algunos ‘kit car’ con el adorable bramido de sus motores atmosféricos.

En esta ocasión, la lista de inscritos superaba los 100 participantes. Con un cartel de lujo y con pilotos de la talla de Jari-Matti Latvala, Marc Duez o Paolo Diana como guinda del pastel, el evento se presentó en un emplazamiento de lujo como el Palacio de la Magdalena y la ‘caravana’ de vehículos, escoltada por la policía local por las calles más emblemáticas de Santander, nos dejó imágenes espectaculares.

A partir de ahí, tocaba hacer las delicias de los aficionados en las carreteras cántabras. Además, a última hora se apuntó a la fiesta Dani Sordo con su BMW M3 E30, de modo que se unía a su ‘viejo amigo’ Jari-Matti Latvala –y Juho Hänninen, claro– para dar mucho gas en los doce tramos que componían esta edición del Rallye Festival Hoznayo.

A pie de cuneta, las sensaciones eran indescriptibles, según me contaba Cristóbal. Pero, si además tienes la oportunidad de subir en el Toyota Celica GT-4 ST165 que llevaba el actual jefe de la marca japonesa en el WRC, ¡el disfrute se eleva a la máxima potencia!

No hay que olvidar que se trata de una prueba en la que no hay tiempos, así que los pilotos pueden olvidarse de la competitividad y simplemente van a disfrutar de sus maravillosas máquinas en las carreteras cántabras y, sobre todo, a dar espectáculo para los aficionados.

Como no podía ser de otra manera, en las cunetas esperaban pacientemente los devotos. Las carreteras de Salcedo, Llueva, Secadura, Güemes o Peña Cabarga –entre otras– han vuelto a recibir a miles de personas, pero también en el parque de asistencia, situado en los alrededores del Hotel Restaurante Adelma, los aficionados dieron por cerrada esta edición con el ya mítico pasillo humano.

Era una edición muy especial, con un cartel dedicado a José Pujol. La acción por fin volvía a mayo y, por supuesto, hubo mucha goma quemada. Allí estuvo Pirelli preparada para la ocasión, no sólo aportando su apoyo a la organización, sino también con todo su ‘arsenal’, incluidos neumáticos especiales para coches históricos.

El fin de fiesta se llevó a cabo en las inmediaciones del Hotel Restaurante Adelma y muchos ya cuentan los días para volver a disfrutar de un ‘show’ como éste, con unas características únicas en España –comparable al RallyLegend de San Marino o al Eifel Rally Festival–. Sí, en mayo del año que viene, ¡todos a Hoznayo!