Wickens volvió a correr 1.258 días después y subió al podio

Wickens lo hizo de la mejor manera posible, subiendo al podio de la categoría TCR en la carrera de la Michelin Pilot Challenge en Daytona, previa a las 24 Horas, aprovechando la oportunidad que le dio Bryan Herta, expiloto de Indycar, propietario de un coche de Indycar y un equipo de TCR, padre de Colton Herta.

"¡1.289 días después vuelvo a estar aquí! En el podio de Daytona. Gracias a todos los que me han ayudado, a Bryan Herta, a Karli, a los que me han acompañado en este largo viaje", señaló Wickens, quien añadió que "ésta no es la meta que me he marcado. Voy a seguir empujando… ¡pero ya volvi!".

El canadiense compartió un Hyundai Elantra del TCR debidamente adaptado junto a su compatriota Mark Wilkins y acabaron terceros. Hizo el primer relevo, hora y media y se mostró con ganas de más.

"Físicamente estoy bien. He estado trabajando duro los últimos meses por si se presentaba la oportunidad, aunque no sabía si sucedería. Me bajé del coche pero estaba listo para poder hacer otro relevo. Me estaba divirtiendo mucho, me sentí muy bien", señaló.

Su satisfacción la dejó clara en un tuit colgado el sábado, 24 horas después de la carrera. "Todavía estoy sonriendo desde ayer. Estoy impaciente por seguir con el resto de la temporada".

Wickens ha seguido una durísima terapia, intentando fortalecer las piernas, incluso es capaz de dar algunos pasos con la ayuda de equipos especiales.

"No hay que esconderlo. No voy a recuperar mis funciones musculares y, salvo que la medicina dé un paso de gigante, pasaré el resto de mis días en una silla de ruedas. Estoy al máximo de lo que mi cuerpo permite y no puedo progresar más desde el punto de vista neurológico", ha señalado claramente Robert, quien añade que "no debo lamentarme porque he podido recuperar muchas funciones".

El Hyundai de los dos canadienses estuvo luchando por la victoria. La carrera, en la categoría de TCR, de cuatro horas, vio muchos cambios de líder, hasta que en las últimas vueltas el Alfa Romeo Giulietta Veloce de Tim Lewis y Roy Block logró una pequeña ventaja para entrar en meta con 9''5 sobre el Hyundai de los campeones actuales, Michael Lewis y Taylor Hagler.

Wickens dijo que desde el primer momento tras el accidente "tenía claro que quería volver a correr y esto me animó en la dura recuperación. Bryan Herta coincidió conmigo en una carrera de IndyCar que fui a ver y me dijo si quería probar uno de sus coches. Tenía uno adaptado ya que Michael Johnsson, uno de sus pilotos, es parapléjico. Y así fue cómo comenzó el retorno".