Manor no se estrena en Melbourne: "Es nuestro primer día de test"

Simplemente porque estemos aquí no significa que puedas girar la llave y salir. Debemos seguir trabajando metódicamente"

En el caso de que sus mecánicos logren acoplar la especificación electrónica del 2015 a la estructura del monoplaza de 2014, Manor afrontaría la dificultad añadida de pasar el llamado 107% en la sesión clasificatoria de mañana. Los coches de esta temporada son cerca de dos segundos más rápidos por vuelta, y vista la lentitud de la antigua Marussia con una unidad de potencia sin desarrollar, todo apunta a que Stevens y Merhi serán incapaces de superar el límite básico de competitividad que impone la FIA para poder participar en la carrera.

Preguntado sobre los objetivos de Manor de cara al día de mañana, su director deportivo, Graeme Lowdon, insiste en que tratarán de aprovechar el tiempo para solventar los problemas en el MR03-B: "Simplemente porque estemos aquí no significa que puedas girar la llave y salir. Debemos seguir trabajando metódicamente", comenta el británico, reconociendo que el equipo dará “absolutamente el máximo” para ofrecer una imagen competitiva en la sesión de clasificación.

Uno de los rumores que circulan por el paddock de Albert Park apunta a que los problemas que afronta Manor son tan complejos que podrían incluso no aparecer sobre el asfalto hasta dentro de varias carreras. "Hoy es efectivamente nuestro primer día de test", destaca Lowdon, consciente de la complejidad de adaptar la tecnología diseñada para 2015 a toda la mecánica del pasado año.

Los presagios más optimistas indican que las incidencias del software podrían ser solucionadas a lo largo de la próxima noche, pudiendo así optar a superar el corte del 107%. Los mayores problemas para Manor, sin embargo, llegan a través su estructura económica. En este sentido, existe la posibilidad de que el gobierno británico haya exigido a sus directivos pagar algunos impuestos pendientes desde hace años, e incluso se especula que Ferrari también les habría pedido ya un adelanto de algunas tasas correspondientes al suministro del motor del 2014.

Ajeno a las dificultades que afronta el equipo en su retorno de última hora a la parrilla, Will Stevens confía en exprimir los recursos existentes en Melbourne para poder participar en la carrera del domingo: "Depende de lo rápido que vayan los chicos de la cabeza. Vamos a hacer el mejor trabajo posible, pero si estaremos en el 107% o no, no lo sé", ha reconocido el piloto británico.