El tatuaje de Abiteboul ya tiene fecha

Brown se ha tatuado esta misma semana en su visita a Estados Unidos aprovechando el reto que Toto Wolff le había lanzado como parte de una iniciativa benéfica. El jefe de Mercedes le retó a hacer algo que le aterrorizara y Zak pensó que hacerse un tatuaje sería buena idea, pues tiene miedo a las agujas.

El jefe de McLaren se ha tatuado el circuito de Monza en honor de la reciente victoria de Daniel Ricciardo allí:

"Las agujas me aterrorizan lo suficiente, así que al pensar en algo que fuese divertido y aterrador, se me ocurrió la idea de hacerme un tatuaje. Obviamente, dado que Daniel es un fanático de los tatuajes y que él ha ganado recientemente, tal vez podríamos unir los dos", ha afirmado Brown al portal web estadounidense Motorsport.com.

Not that Monza was going to be forgotten in a hurry… #McLaren #F1 pic.twitter.com/wNgeNs4ecx

— Zak Brown (@ZBrownCEO) October 23, 2021

A Ricciardo, esto le ha recordado a otro tatuaje pendiente. En 2020, Abiteboul le prometió que se tatuaría si conseguía subir al podio. El piloto australiano elegiría el diseño –un 'honey badger', el animal con el que se representa a sí mismo– y Cyril se encargaría del lugar y del tamaño. Después de meses sin saber nada de la apuesta, Daniel ha revelado que su exjefe se tatuará en las próximas semanas.

"No sabía que Zak se iba a hacer un tatuaje. Pero lo de Cyril ya está fijado. Será entre Catar y Arabia Saudí. Después de que Zak se haga un tatuaje, va a tener más ganas, va a pasar", ha afirmado en una rueda de prensa en la que ha estado presente SoyMotor.com.

A su llegada a McLaren, Daniel quiso repetir la misma apuesta con su nuevo jefe, pero Brown se negó. El estadounidense se ofreció a pilotar uno de los coches de la Nascar que forma parte de su amplia colección. La apuesta se ha saldado este mismo fin de semana, ya que Ricciardo ha rodado en Austin por el Chevrolet Monte Carlo que Dale Earnhardt pilotó en 1984.