Insight F1 GP Rusia 2021: patinando en el circuito de hielo

A lo largo de mi trayectoria en las carreras, especialmente en las que me ha tocado estar en el muro la lluvia y el agua me ha enseñado dos lecciones muy importantes. La primera de ellas es que es "la amiga de las dos caras", tan imprevista como desconocida. Cuando estás en pista nunca vas a saber ni cómo, ni cuánto, ni dónde ni siquiera si va a llover. Y en muchas ocasiones, cuando crees que va a llover no llueve, y cuando no la esperas aparece. Esto lleva a tener un enfoque totalmente reactivo con ella, es decir, nunca puedes anticiparte a ella, sobre todo en la elección de neumático, sino que debes ser lo más reactivo posible, es decir, estar preparado para reaccionar en el momento adecuado para cuando llegue.

Ante su llegada lo que necesitas tener es siempre tres cosas, a cuál más importante. Necesitas en primer lugar un radar meteorológico, ya sea del servicio oficial de la carrera si hay o de páginas web que te ofrecen este servicio. También necesitas tener muy claros los cross-overs, es decir, los tiempos de sector y de vuelta que te señalan el estado en que está la pista. Y lo más importante, necesitas oír al piloto, pues él es quien te va a decir cómo está cada metro de la pista, y lo que necesita o no necesita tener montado en su coche. 

De estos tres aspectos, pudimos ver en la jornada de ayer la evolución del cross-over, y en el informe previo de Sochi las referencias en tiempo de los cross-over. 

Con estas cosas en mente llegamos a la carrera de Sochi. Nos vamos a detener en las últimas ocho vueltas de la carrera, que fueron absolutamente claves. Ésta fue la evolución de los tiempos en las últimas vueltas de la carrera:

Como se pudo ver los tiempos en la vuelta 45 estaban en torno al 1'38''-1'42'', pero desde ahí empezaron a elevarse de una manera importante, en especial a partir de la vuelta 47, en la que el agua empezó a llegar con toda la fuerza. Después de este momento ya no volvió a bajar de 1'48'', y estando para intermedios, hubo varios pilotos que se fueron lejos de este rango, consecuencia de la falta de agarre en los neumáticos. La ventana de paradas en los giros finales fue la siguiente:

Una de las cosas que empezaron a notarse en la imagen anterior es que el momento clave de la entrada en boxes era la vuelta 48, porque a partir de ahí los tiempos empezaban a elevarse. No antes, como le pudo pasar a Valtteri Bottas, Kimi Räikkönen, George Russell o sobre todo Tsunoda, que buscó un juego de blandos. Pero desde luego no después, como se encontraron Fernando Alonso, Sergio Pérez, Sebastian Vettel, Pierre Gasly, Esteban Ocon o Charles Leclerc. Queda tan clara conformada esta pequeña ventana que se pudo ver que nadie del top 5 paró después de la vuelta 49, y que todos los que esperaron a la vuelta 50 sólo tres sumaron, como el fue el caso de Fernando Alonso, Lando Norris o Sergio Pérez, que tenían un gran margen por delante.  Ante esta situación éste fue el desarrollo de la carrera de Norris y Hamilton en las vueltas finales:

La primera parte del circuito no tuvo apenas problemas para el británico, pero la lluvia entró por la Curva 5, y ahí empezó a perder muchísimo tiempo, como se ve en el 44.4 que tuvo en la vuelta 48, a cinco vueltas para el final de la carrera. Un aviso más que claro, que le llevó a perder 15seg con respecto a dos vueltas antes, y que le hizo a su equipo llamarle a boxes. Pero no escuchó, y volvió a tener dos avisos más, antes de que la pista fuera ya impracticable, con un 79.6, que fue 42 segundos más lento, al extenderse ya no sólo ahí, sino también a S1 con un 52.5. Hamilton no esperó tanto, y tras el susto que se llevó en esa vuelta 48, con el 44.2, y que también se reprodujo en la vuelta siguiente, su equipo optó por pararlo y no esperar más. Un movimiento clave que incluso le hizo ser más rápido con la entrada del neumático intermedio de lluvia. A partir de ahí le fue sencillo recuperar todo el tiempo que estaba perdiendo Norris, y aunque paró una vuelta más tarde, lo que en si podía ser un error, fue mucho menor que el cometido por Norris y sus rivales más cercanos.

En el resto de los pilotos de esta zona así fueron estas vueltas finales:

Y la evolución de las posiciones:

La clave de todo ello, y lo que marcó el resultado, fue el momento en que entraron en boxes los pilotos, como hemos visto anteriormente entre la comparación de sectores de Lewis Hamilton y de Lando Norris, que le llevó a recuperar en una vuelta toda la entrada en boxes, mientras al esperar tanto Norris acababa atrapado por el grupo. Charles Leclerc, Fernando Alonso y Sebastian Vettel, que habían optado por seguir fuera, perdieron todo en la vuelta que siguieron fuera con el neumático de seco, con una cantidad de agua demasiado grande, lo que les dio mucho margen para que pudieran avanzar Max Verstappen, Carlos Sainz o Daniel Ricciardo. Precisamente en McLaren nos pudimos encontrar una de las grandes claves, pues el australiano obedeció la llamada y acabó cuarto mientras Norris no lo hizo y fue séptimo. 

Pero como se ha comentado antes, una herramienta básica de todo este final de carrera era la radio, y la voz del piloto. Si quería parar había que cambiar, si quería seguir fuera había que seguir fuera. Una situación que sólo se gana a partir de la experiencia, de equivocarse y de poder gestionar y aprender de los errores. Norris no ganó, pero esta derrota le hará ganar mucho en el futuro. La lluvia, tan imprevisible como inesperada, traducida en las dosis de experiencia y reactividad tan importantes.