Surrealismo en el WRC (VIII): Ferrán Font se estrelló en China contra un coche de la organización... ¡que iba en dirección contraria!

La única edición que el Rally de China fue una prueba puntuable para el WRC –en 2016 se intentó, pero las tormentas dejaron el recorrido impracticable– tiene mil y una historias para contar: desde el abandono de los dos Ford Focus RS WRC en la misma curva del primer tramo hasta el atropello de un espectador por parte de Juha Kankkunen.

El Rally de China fue durísimo, todos los pilotos coincidieron en que se trataba de una prueba parecida a la de Indonesia, pero con más peligros añadidos, sobre todo en los enlaces. Uno de los problemas residía en el itinerario: el rally pasaba por muchas aldeas en las que la gente no entendía lo que ocurría… y siguieron haciendo vida normal mientras los coches pasaban.

Hasta China se desplazaron Ferrán Font y Joan Sureda. Por aquel entonces, el andorrano era todo un amante de la competición que había destacado en la Copa Ibiza del Nacional de Tierra y se propuso correr poco a poco todas las pruebas del Mundial. Probó suerte en Portugal, Argentina, Nueva Zelanda, Australia, Indonesia… ¡hasta el Safari!

De esta manera, cuando el WRC anunció que iría a China, Font no se lo pensó dos veces. Con su Ibiza GTi y Joan Sureda a su diestra, el piloto andorrano se embarcó en esta ‘aventura’ sin marcar objetivos, pues era consciente de que los Hyundai Coupé Kit Car de Alister McRae y Kenneth Eriksson estarían en un nivel superior.

Lo que no sabía era que su rally terminaría después de completar sólo cuatro especiales debido a un error ajeno. En pleno enlace hacia el séptimo tramo –el segundo y el sexto fueron cancelados–, Ferrán y Joan no pudieron evitar a un coche que venía en dirección contraria y sufrieron un fuerte accidente que derivó en un abandono inmediato.

Para más inri, el coche que venía en dirección contraria era de la organización. Pero todo tiene una explicación, aunque en ningún caso puede servir de excusa por una negligencia de este calibre: el Rally de China se celebró con la ayuda de la organización australiana, y en Australia se circula por la izquierda, mientras que en China lo hacen por la derecha.

El accidente se produjo por un despiste de un australiano que creyó estar conduciendo en su país. Un despiste que habrá ocurrido en una infinidad de ocasiones cuando alguien es ‘obligado’ a cambiar sus hábitos de conducción, pero en esta ocasión acabó con Ferrán Font y Joan Sureda en el hospital. Por suerte, excepto algunas lesiones de espalda, todo quedó en un susto.

Como decía unas líneas más arriba, el rally fue totalmente caótico. Antes incluso de comenzar, tenían preparada una ceremonia de salida espectacular con fuegos artificiales que tuvo que ser sustituida por una más convencional debido a la lluvia. Una lluvia que convirtió los tramos en barrizales y puso a los pilotos en serios apuros.

Como consecuencia del cúmulo de catástrofes, al año siguiente sería sustituida por un Rally de Chipre –también muy polémico– en el que Carlos Sainz y Luis Moya cortaron su peor racha mundialista. China se quedaría con la de 1999 como la única edición de su historia inmersa en el Campeonato del Mundo. En 2016 se volvería a intentar, pero la meteorología lo impidió.

Ferrán Font continuó su carrera deportiva e incluso unos años más tarde hizo algunas apariciones en la Copa de Producción con un Mitsubishi Lancer Evo VII, para después cambiar de rumbo hacia los rallies de coches históricos. A día de hoy sigue ‘en forma’, el año pasado corrió el Rally de Tierra Circuito de Navarra con un Ford Fiesta R5.