La Alianza Renault-Nissan, en crisis

En la trastienda de todo este lío están dos hechos. El primero, el rumor de que Carlos Ghons estaba dispuesto a despedir al hombre fuerte japonés de Nissan. El segundo, el descontento de Nissan por su papel en la alianza.

Es cierto que en La Alianza, sociedad radicada en Holanda por causas fiscales –al igual que el grupo FCA– con el nombre de Renault Nissan BV –RNBV–, está participada al 50% por ambas firmas, pero el poder francés y el japonés no parecen equilibrados a causa de las participaciones cruzadas.

Renault posee el 43,4% de Nissan, lo que le da poder de decisión, mientras que Nissan sólo tiene un 15% de Renault. Mitsubishi, marca recientemente integrada, es propiedad al 34% de Nissan. Además, recientemente el gobierno francés parecía interesado en transformar la Alianza en una fusión o absorción, tomando el control de Nissan pese a las reservas de la parte japonesa.

El consejero delegado de Nissan, Hiroto Saikawa, exigió recientemente cambios para que la parte japonesa tuviera un poder decisorio superior, especialmente teniendo en cuenta que, en buena parte de los ejercicios, la parte mayor de los beneficios se debían a Nissan.

Mientras el Consejo de Nissan ha decidido despedir a Ghosn mientras continúa detenido en Japón, el Consejo de Renault ha optado por mantenerle al frente del grupo francés, al no encontrar evidencias de mala práxis en el cobro de sus nóminas, ya sean en metálico o en especies. No obstante, la compañía francesa ha nombrado a Philippe Lagayette como presidente interino y a Thierry Bollore como director ejecutivo adjunto hasta que se tome una decisión definitiva.

El Gobierno francés, accionista de referencia de Renault –su 15% le convierte en el principal accionista–, ya ha expresado su opinión de que Ghosn deberá ser cesado si se le imputa formalmente.

La investigación francesa se ha efectuado sobre los pagos a Ghosn entre 2015 y 2018, y ha sido liderada por Claude Baland, ex director general de policía nacional francesa, y Eric Legrand, responsable de buenas prácticas del grupo. El resultado es aún preliminar, porque la investigación se ampliará hasta 2010 y además interesará a otros altos cargos del grupo.

El escándalo saltó a raíz de una investigación interna en Nissan como resultado de unos pagos en diferido de más de 40 millones de dólares, que Ghosh no habría declarado al fisco japonés. Además hay indicios de ciertos bienes de la compañía usados por Ghosn para beneficio personal, entre los que se habla de algunas mansiones: Nissan ha puesto demanda en Brasil contra la hermana de Carlos Ghosn porque, al parecer, vive en la mansión que Nissan adquirió para su exdirectivo.

Abogados de Renault y Nissan se han reunido hoy y los japoneses han aportado el informe confidencial de las investigaciones, que al parecer contiene más elementos de los que hasta ahora se han aireado.

Cherie Blair, esposa del primer ministro británico Toni Blair y miembro del Consejo de Renault, expresó la necesidad de dar pronta solución al tema porque no se podía eternizar esta situación y era necesario avanzar. También quisiera saber más sobre RNBV, la 'matriz', que al no cotizar en bolsa no tiene que hacer públicas sus cuentas, y se sospecha que podría haber financiado proyectos o costes ajenos a sus fines.

Mientras, han comenzado a surgir 'quinielas' sobre el posible sustituto de Ghons. Inicialmente sonó el nombre de Carlos Tavares, durante mucho tiempo mano derecha de Ghons, pero que en la actualidad es el máximo ejecutivo de PSA. El otro sería Didier Leroy, un alto ejecutivo de Toyota.

El asunto es bastante complicado y con muchos puntos oscuros. Parece que subyace en el fondo un 'juego de tronos' y lo que queda claro es que, si se mantiene La Alianza, habrá seguramente otro reparto de poder y, sobre todo, dejará de estar concentrado en una sola persona como era el caso de Ghosn. El tema afecta a España, donde tanto Renault como Nissan tienen unidades productivas.