¿Son las carreteras de grafeno el futuro?

El grafeno es un material 200 veces más fuerte que el acero y hasta cinco veces más ligero que el aluminio. La combinación de esas dos propiedades de él un producto excepcional y su aplicación está claramente en auge. 

Numerosas empresas y laboratorios estudian la conductividad del grafeno para emplearlo en la fabricación de nuevas baterías para la creciente oferta de vehículos eléctricos pero, tal vez un uso más próximo del grafeno pudiera estar bajo nuestros pies.

Las empresas italianas Directa Plus –especializada en productos de grafeno– e Iterchimia –dedicada a los aditivos para el asfalto–, ha creado un producto denominado 'Eco Pave' basado en el grafeno para la construcción y el mantenimiento de carreteras. 

Según han anunciado ambas compañías, el uso de su producto permitirá crear carreteras mas duraderas y resistentes, además de ser un compuesto 100% reciclable. Las empresas italianas ya han hecho sus primeros test en laboratorio y pronto podríamos veremos las primeras pruebas en carreteras reales. 

Como material, el grafeno es buen conductor y puede aplicarse a diferentes rangos de temperaturas. Con este aditivo el asfalto de la carretera no se reblandecería antes las altas temperaturas del verano ni agrietaría con la llegada del frío extremo. De este modo se reduciría notablemente el desgaste sufrido por el paso de vehículos dada su gran resistencia y elasticidad. 

Según los cálculos preliminares de las compañías implicadas, el grafeno podría alargar la vida útil de las carreteras de seis o siete años a más del doble.

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