El Corvette se convierte en hiperdeportivo con el ZR1 de 1.064 caballos

El meollo de la cuestión es el motor LT7. Es el nuevo V8 biturbo que ha preparado General Motors.

Comparte el bloque con el motor LT6 y la cilindrada, 5.5 litros, por supuesto con doble árbol de levas por bancada y 4 válvulas por cilindro. Pero dos turbocompresores de 76 milímetros aportan, junto a algunos ajustes, permiten alcanzar 1.064 caballos de potencia y un par motor de 1.160 Newton metro.  Este motor tiene la misma potencia que dos de los motores 7.0 V8 atmosféricos de la anterior generación Corvette.

Las prestaciones son espectaculares. Puede alcanzar los 345 kilómetros/hora y hacer el cuarto de milla –referencia a las carreras de dragsters estadounidenses– en menos de 10 segundos.

Obviamente, aunque el bloque sea el mismo del LT6, el trabajo efectuado es importante. Desde la refrigeración a la inyección, pasando por la lubricación –cárter seco– los árboles de levas, escapes e incluso una cámara de combustión de mayor tamaño. Y será un motor ensamblado a mano.

La transmisión a las ruedas posteriores está confiada a un cambio de doble embrague de 8 velocidades, modificado para soportar las nuevas prestaciones del motor.

Nos hemos centrado en el motor, pero Corvette no quería un muscle-car sino un hiperdeportivo, así que el trabajo ha sido integral, con atención al chasis, la aerodinámica y la carrocería para que las cualidades dinámicas estuvieran a la altura de esta categoría.

Modificaciones en la carrocería, un splitter delantero dividido y un alerón posterior ajustable, además de entradas de aire de mayor tamaño. Llantas forjadas de 20 pulgadas delante y 21 detrás con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S –275/30ZR20 delante; 345/25ZR21 detrás–. Pero quizás el detalle más característico de esta versión es la luneta posterior dividida, que fue una de las características de los primeros Corvette Sting Ray.

Frenos carbocerámicos de mayor tamaño, con 400 milímetros delante y 390 detrás, con pinzas de 6 y 4 pistones. Amortiguadores Magnetic Ride, techo en fibra de carbono para la versión coupé –también se ofrecerá en versión Cabrio– están a la altura de las nuevas prestaciones. De hecho, algunas piezas de la carrocería también son de fibra de carbono para que el peso no supere los 1.665 kilos. en la versión cupé.

Pero si el cliente quiere algo más, ahí está el ‘paquete ZTK’, opción que favorece el comportamiento dinámico. Incluye un alerón trasero más eficaz e impactante, otros detalles aerodinámicos, suspensiones más rígidas, neumáticos Michelin Pilot Sport Cup2.

Desde ahora, este Corvette será la gran referencia de los deportivos estadounidenses. Puede poner un hypercar 1000 CV al alcance de un grupo más amplios de clientes… aunque algunos pueden pensar que al tener ‘hermanos menores’ no tiene la exclusividad y glamour suficientes.