Lamborghini Huracán STJ: un coche curiosamente relacionado con el número diez a la espera del Temerario

El Lamborghini Temerario asoma ya en el horizonte como sustituto del Huracán. Pero no, este hecho no ha impedido que la casa de Sant'Agata Bolognese le brinde una despedida de altura a este modelo. Un adiós que está muy relacionado con el número diez. Se trata del Lamborghini Huracán STJ, una edición especial de la que sólo se van a fabricar una decena de unidades todas ellas dotadas de un motor V10 que se despide de esta estirpe y sí, de un modelo que se presentó hace diez años.

El Lamborghini Huracán STJ debe su apellido al Super Trofeo, que es el campeonato monomarca del fabricante, y al anexo 'J' del reglamento de la FIA que establece las especificaciones de los coches de carreras. Además, estas siglas mantienen en parte la tradición de unidades como el Miura SVJ o el Aventador SVJ, desarrollados para los circuitos. En el caso del Huracán STO, modelo inspirado en el Lamborghini Huracán Super Trofeo EVO y en el Huracán GT3 EVO en el que se basa éste, hablamos de Super Trofeo Homologato.

Así mejora el STJ al Lamborghini Huracán STO

Cuentan desde Lamborghini que el Huracán STJ ha sido capaz de bajar más de un segundo entero el tiempo logrado en su momento por el STO en el Nardò Technical Center Handling Track. Cabe recordar que éste ya era un coche pensado por y para rendir sobre un circuito con un peso de 1.339 kilos, lo que suponía un ahorro de 43 kilos respecto al Huracán Performante, de 40 respecto al Tecnica y de unos 110 respecto a la versión 'convencional' del superdeportivo italiano. Suponemos que con el STJ no hay mejora en este aspecto ya que Lamborghini no ha dado el dato, pero sí sabemos que respecto al STO incorpora un pack aerodinámico específico desarrollado por Lamborghini Squadra Corsa. Aparecen nuevos apéndices hechos en fibra de carbono y un alerón trasero que aporta un 10% más de carga.

Otro de los puntos clave que incluye el Lamborghini Huracán STJ son cuatro amortiguadores ajustables en cuatro direcciones. La idea de esta solución es que se puedan optimizar tanto la compresión como el rebote en altas y en bajas frecuencias. Por su parte, las llantas de 20 pulgadas son monotuerca.

El motor del Huracán STO es suficiente

El aumento de rendimiento del Lamborghini Huracán STJ respecto al STO depende de los ajustes nombrados y no de un motor optimizado. El corazón del STJ es exactamente el mismo V10 de 5.2 litros con 640 caballos de potencia y un par máximo de 565 Newton metro. La caja de cambios, por su parte, es automática de doble embrague con siete velocidades, mientras que el sistema de tracción es de propulsión.

La firma italiana no ha compartido datos acerca de las prestaciones del Huracán STJ, pero no hay razones para pensar que serán muy diferentes a las del STO. Éste logra acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 3 segundos y alcanzar una velocidad punta de 310 kilómetros/hora. Curiosamente sobre el papel estos datos le sitúan por detrás del Huracán Performante o del Huracán Evo, gracias a su tracción total y a la menor resistencia al avance que tienen por motivos aerodinámicos. Donde entona el 'do de pecho' el STO, y por tanto también el STJ, es en su rendimiento en curva.

Así se distingue a un Lamborghini Huracán STJ

La estética del Lamborghini Huracán STJ depende de una simple elección por parte del cliente. Tan sólo están disponibles dos opciones, ambas diseñadas por Lamborghini Centro Stile. La primera de ellas combina una carrocería en color gris con detalles rojos y blancos más un techo negro. La segunda presenta una carrocería azul con idénticos colores para el techo y los detalles.

Por su parte, en el interior del STJ, independientemente del color de su carrocería, se encuentran unos asientos negros forrados en Alcantara cuyas costuras vienen en rojo y sus detalles en piel. Además se incluye una placa especial numerada de fibra de carbono que refleja la unidad en concreto de la que se trata, a lo que se suma la opción de incluir una placa personalizada en el lado del pasajero.